Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- En el balneario municipal “Aserradero”, continuarán las medidas de seguridad, calidad del agua, educación ambiental y sustentabilidad, pese que prácticamente perdió su nominación de Blue Flag, por falta de pago para su renovación.

Corina Vázquez Jansen, directora de Turismo Municipal, confirmó que no se realizó el pago de renovación de la distinción para Bacalar.

El Ayuntamiento no podría absorber el costo que es de alrededor de 200 mil pesos.

En caso de haberlo hecho, resaltó, dejaría desprotegidos a los diversos programas que están dirigidos a la comunidad.

También te puede interesar: Proponen cancelar Blue Flags en Cancún

Afirmó que en el 2015, cuando se nominó a Bacalar como el primer cuerpo de agua en alcanzar ese nombramiento, se estableció el convenio de que el gobierno del estado, vía la Secretaría de Turismo, se encargaría de pagar la renovación y el Ayuntamiento, de cumplir con los criterios que establece el programa.

(Javier Ortiz/SIPSE)

Aseguró que cada mes se envía a esa instancia estatal, un reporte sobre el cumplimiento de los criterios respectivos, con lo que se da cumplida la parte que compete a la comuna bacalarense; sin embargo, continuarán con las buenas prácticas que dicta dicho programa, a pesar de que este año no se renueve su nominación como Blue Flag.

Recordó que el año pasado, también se puso en riesgo la ratificación de la nominación como Blue Flag al balneario “Aserradero”, pero de última hora, la Secretaría de Turismo realizó el aporte necesario y continuó con tal distinción, lo que no sucedió este año.

Vázquez Jansen, dijo que de acuerdo con los criterios que establece la permanencia del programa, contempla acciones de educación ambiental tales como un panel informativo, un quiosco de información, crear programas de conciencia y cuidado del ecosistema, promover la sustentabilidad de las actividades recreativas y turísticas de la zona.

Debe contar con información expuesta sobre la calidad del agua de manera actualizada, contar con información pública sobre los ecosistemas litorales, espacios naturales sensibles y especies protegidas en esa zona costera así como de los fenómenos ambientales, debe contar con información amplia sobre las actividades permitidas, zonas establecidas para ello,  conducta del visitante, entre otras cuestiones que se pueden observar en dicho balneario.