Alejandra Carrión/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Los productores apícolas en el municipio de Bacalar atraviesan por serios problemas, por los cambios climáticos y a su limitada capacidad tecnológica, científica y de innovación, dejándola como actividad secundaria.

Agripino Rodríguez Morales, productor de vino de mesa elaborado a base de miel, en la comunidad de Buena Esperanza, del municipio de Bacalar, señaló además de las limitantes para incrementar su productividad, año con año se presenta una mortandad de abejas lo que ha propiciado el y abandono de apiarios.

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"No es una situación exclusiva, sino es por la misma que a traviesan los más de 120 productores que integran la sociedad “KabiHabin en Bacalar. Además de nosotros hay apicultores que se dedican a la producción de dulces, conservas a base de miel, que también están con problemas".

De acuerdo con el Centro de Innovación para el Desarrollo Apícola Sustentable, la producción apícola de la región se ha visto afectada por contingencias ambientales como huracanes, ciclones e inundaciones por el contrario, intensa sequía, que han traído como consecuencia la inestabilidad en las épocas de floración y la disminución de recursos nectarpoliníferos, ocasionando retrasos en los inicios de las cosechas, baja o nula producción de néctar, o simplemente que los árboles no florezcan.

Adicionalmente también representan obstáculos de producción, la deforestación y los efectos climáticos.

En el municipio de Bacalar, donde hay más de 250 productores la apicultura se traduce en una actividad complementaria con otras de subsistencia familiar, anualmente se producen 400 toneladas del dulce, de las cuales 300 se van al extranjero como miel orgánica.

En Quintana Roo existen productores dedicados a la actividad apícola cuya producción anual actual es de alrededor de tres mil 300 toneladas de miel.

Se estima que existen alrededor de 234 comunidades y tres mil 600 productores dedicados a la actividad apícola, integrados en 22 organizaciones sociales con cerca de 101 mil colmenas, 26 centros y subcentros de acopio, de los cuales 14 son de la iniciativa privada y 12 de organizaciones sociales.