Ángel Castilla/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La vigilancia en toda la frontera natural entre México y Belice, es imposible, reconocieron autoridades militares de ambas naciones, porque no se puede establecer un vigía en todos los puntos de cruce que existen. Sin embargo, consideraron que la frontera sur, continua siendo una “frontera segura”.

El general Gerardo Wolburg Redondo, jefe de Estado Mayor de la 34 Zona Militar de Chetumal y coronel Steven Ortega, de la Fuerza de Defensa de Belice, encabezaron la XI Junta de Comandantes Fronterizos México-Belice, efectuada ayer en Chetumal, donde trataron asuntos de interés común para las fuerzas armadas de ambos países.

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Se trata de una reunión periódica y “normal” que se realiza entre las fuerzas armadas de las dos  naciones, cuyo objetivo es atender los asuntos de interés común por compartir una frontera habitual, como aspectos de seguridad y otros puntos, sin precisar por cuestiones de seguridad.

“La problemática de la frontera es el trasiego de enervantes, paso de materiales ilegales y la necesidad de reforzar la vigilancia a efecto de lograr desistan las personas de efectuar actividades ilícitas”, señalan.

En ese mismo sentido, el coronel Steven Ortega, de la Fuerza de Defensa de Belice, expuso que la coordinación entre ambas naciones ha permitido la disminución de las actividades ilegales pero aún falta mucho por hacer.

“El departamento de policía en conjunto e intercambio de información con las fuerzas castrenses mexicanas, han logrado la detención y arrestos de varias personas dedicadas a actividades ilícitas, a muchas actividades ilícitas”, señaló.

Entre las operaciones coincidentes entre las Fuerzas Armadas Mexicanas y Belice, se encuentran, garantizar la vigilancia del espacio aéreo nacional, mejorar la divisbeliión territorial militar y despliegue militar, coadyuvar con las autoridades responsables de la función de seguridad pública y la contención de la violencia en ambos países.

Trabajo en equipo

A finales de 2016, el embajador de México en Belice, Carlos Quesnél Meléndez, reconoció que la frontera natural entre ambas naciones, el Río Hondo, se utiliza para el trasiego de mercancía ilegal, ganado, armas e incluso, trata de personas.

“Sabemos que existe una problemática, si bien está correlativamente bajo el control de ambos países, México le da bastante cooperación a Belice y hay que reconocer que es un país que afortunadamente coopera mucho, tenemos que reforzar esa frontera, tenemos una tarea pendiente, pero afortunadamente hay una gran voluntad de las dos naciones”, añade.

Incluso dijo que una de las problemáticas más importantes es el contrabando de mercancía en ambos sentidos, y además de los esfuerzos en materia de seguridad que deben hacer los dos países, es más importante tener un acuerdo de Libre Comercio que permita a los comerciantes e inversionistas hacer los negocios libremente, sin ningún tipo de trabas administrativas y seguramente ayudará a reducir este fenómeno.