Stephani Blanco/SIPSE
CANCÚN, Quintana Roo.-  Con ayuda de observadores, la dirección de Fiscalización retiró en marzo a más de dos mil menores de las puertas de los bares y discotecas de Cancún, siendo el fin de semana de vacaciones de Semana Santa cuando identificaron a 700 jóvenes.

En marzo contabilizaron casi el mismo número de menores que en los dos meses anteriores (enero-febrero), que en conjunto sumaron a mil 800, en parte es por el turismo que recibieron, dijo Eduardo Mariscal de la Selva, director de la dependencia en el municipio.

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“El último fin de semana fueron varios los que quisieron entrar y aunque la labor fue ardua, no hubo ninguna sanción, pues no encontraron a nadie adentro, ya que los empresarios están tomando conciencia”, dijo.

De octubre de 2016 a la fecha son más de 20 mil menores de edad que no lograron entrar a un centro nocturno tanto en el centro como en la zona hotelera y trabajan en las puertas con 40 observadores que están vigilantes en las entradas.

“Trabajan desde el jueves y salen hasta el domingo, siendo de varias asociaciones, universidades públicas y privadas, y lo que realizan es verificar la entrada, si no cuentan con una identificación oficial avisan para que no puedan ingresar”, explicó Mariscal de la Selva.

En marzo Cancún recibió a los jóvenes de Estados Unidos del Spring Break y el cierre de esta temporada se juntó con el arribo del turismo nacional. Durante el período vacacional están trabajando con más personal para evitar también incidentes; por el momento hay saldo blanco.

En el caso de las playas registran un alza de basura de plástico, latas y colillas, siendo playa Delfines una de las que más afluencia de personas tiene y que más desechos registró, seguido de playa Del Niño; en total fueron 2.5 toneladas el fin de semana, cuando en un día normal son 500 kilogramos los que recogen en los arenales, informó Ubaldo Roberto Canul, director de Pozos y Limpieza de Playas.

La gente aún no hace conciencia de dejar los arenales limpios al retirarse de ahí, dejando su basura pese a que hay botes para depositarla.