Pedro Olive/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El basurero ubicado en la carretera a Leona Vicario, a unos metros de “Gas Imperial”, opera de manera ilegal, ya que únicamente cuenta con permisos para operar como centro de acopio para aprovechamiento de residuos orgánicos, y una unidad de producción pecuaria (granja de cerdos).

Los administradores no cuentan con procesos adecuados para tratamientos de residuos sólidos orgánicos, e incluso, manejan desechos que son inorgánicos, para los cuales no tienen permisos.

Fue antes de la salida del exgobernador Roberto Borge Angulo, cuando se apresuraron los trámites para renovar los documentos que permiten la operación del basurero clandestino.

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Las licencias para operar fueron emitidas por autoridades estatales de los rubros de ecología, medio ambiente, salud, desde 2014, pero únicamente para desechos orgánicos y antes de salir la administración pasada, renovaron todos los permisos, actualmente almacenan recipientes de plástico, los tiran dentro del terreno y tapan con tierra.

José de la Peña Ruiz Chávez, es señalado por vecinos del lugar, como funcionario público que frenó muchas denuncias y procesos legales, mientras estaba al frente de la Secretaría General del Ayuntamiento de Benito Juárez, en el trienio de Paul Carrillo de Cáceres.

El predio en mención, además funciona como un centro de reproducción, engorda y venta de fauna porcina, sus desechos son vertidos sobre el suelo, el líquido que despide se filtra al subsuelo, dañando los mantos freáticos, además de emitir malos olores, generar la proliferación de fauna nociva como ratas, moscas y cucarachas, con la que los vecinos tienen que lidiar.

Lo denunciaron desde el año pasado

Desde finales del año pasado, la queja de los vecinos ha sido por los malos olores que el basurero y la crianza de los puercos despiden, desde la instalación de esta administradora de residuos sólidos, los vecinos han presentado quejas ante diferentes instancias de gobierno, municipal, estatal y federal.

“En marzo de 2015 se realizó una verificación, en respuesta a la queja de vecinos del predio, por la operación de un basurero, la dirección envió a los inspectores, dejaron un citatorio y solicitud para presentar las pruebas de la legalidad del negocio, ante la negativa, se procedió a realizar una suspensión temporal”, dijo Heiden Cervantes Quijano, coordinador Jurídico de la Dirección de Ecología del municipio de Benito Juárez.

Para verificar las condiciones del predio, observamos a la distancia, desde el terreno de Jesús Baltazar Yam, vecino colindante, que en la parte de atrás hay una construcción y cimentación reciente, para la que necesitaron un permiso de Ecología, del que no hay documentos en la dependencia.

Además, en el terreno, por la parte trasera, se observa una capa de sascab recientemente vertida, y debajo, restos de plásticos como botellas de pet, cartón, pvc, entre otros materiales, que no están autorizados para almacenar.

Los vecinos en mención comentaron que la administración pasada se acercó a las autoridades correspondientes, uno de ellos, el ex secretario del Ayuntamiento, José de la Peña Ruiz Chávez, quien los recibió y dijo atendería la queja, al día de hoy, los afectados no recibieron ningún tipo de apoyo.

A través de una petición de información realizada a la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), con relación a los permisos emitidos, la dependencia respondió: “Está registrada ante la Secretaría como Recolector y Transportador así como Centro de Acopio de residuos de manejo especial.

De acuerdo a lo establecido en su Plan de Manejo, las actividades que desarrolla son recolección y acopio de Residuos de Manejo Especial (reciclables así como residuos orgánicos provenientes de alimentos y frutas y verduras así como de poda)”, en ningún momento se mencionaron desechos inorgánicos.

Autoridades no pueden pasar

Hasta ahora las autoridades municipales de ecología no han podido tener acceso al predio para realizar inspecciones y tomar pruebas del agua para evaluar los contaminantes que emiten, porque dicho lugar está sujeto a una investigación en el departamento jurídico de Ecología Municipal.

“Tenemos muchos reportes de los mismos vecinos, acudimos con las patrullas verdes para intentar entrar, pero los dueños, en particular una señora, se pone agresiva, nos dice que hay un proceso legal, y para no entorpecerlo, nos dice que debemos declinar del acceso”, comentó Gabriel Armín Herrera Casanova, coordinador de Inspección y Vigilancia, de la Dirección de Ecología Municipal.

A través del departamento jurídico se dio a conocer que la verificación de los protocolos de saneamiento y trato de los residuos sólidos orgánicos e inorgánicos, corresponden a quien emitió los permisos (en este caso Secretaría de Ecología y Medio Ambiente), sin embargo, las autoridades estatales han hecho caso omiso.

En contraste, cuando los inspectores han llevado notificaciones para una revisión, “alguien”, que hasta ahora desconocen, alerta a los dueños del predio señalado, y cuando llegan no hay rastro de residuos, que se supone ellos manejan, y todo está en “orden”, esto sin dejar de mencionar que el acceso es limitado.

Durante los últimos tres años del sexenio anterior, la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), protegieron el basurero, y fueron esas dependencias las que emitieron los permisos correspondientes para que se desarrollara este basurero y granja de puercos, en agosto de 2016, antes de salir la administración anterior, fueron renovados todos los permisos.

Los vecinos afectados, presuponen que hay intereses de políticos desde la administración anterior, razón por la cual no han podido ingresar, ni realizar más investigaciones.

La SEMA señaló que los permisos se encuentran vigentes hasta ahora, sin embargo no han dado fechas para revisión; de manera extraoficial, los mismos vecinos señalan que el basurero tiene el apoyo por parte de José de la Peña Ruiz Chávez, exsecretario general del Ayuntamiento de Benito Juárez, en la administración de Paul Carrillo de Cáceres.