Yesenia Barradas/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- Las llegadas tarde a casa, las contestas ingestiones de alcohol y una infidelidad producto de una borrachera; hicieron que Josué perdiera a su familia y que lamentablemente forme parte de las estadísticas de más de 12 mil trabajadores que tiene problemas de alcoholismo en Playa del Carmen.

El coordinador del Programa de Combate a las Adicciones de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Pablo Antonio Villafranco Alvarado, lamentó que hasta un 50% de los trabajadores agremiados a la organización que se desempeñan en el turismo, tengan problemas de alcohol; el frente sindical alcanza los 24 mil afiliados en ese sector.

La ingesta de alcohol no sólo repercute en su desempeño laboral, salud individual y vida familiar, sino que es la puerta de entrada a otro tipo de adicciones como el consumo de drogas y estupefacientes, consideró.

No obstante, la CROC “sólo puede medir el consumo de alcohol, porque en las drogas no es fácil de detectar, mientras que cuando un compañero sale tomado de una empresa, lógicamente lo agarra seguridad y es despedido”, señaló.

Aseguró que la CROC está trabajando en combatir el problema y pidió una oportunidad a las empresas para rehabilitar a sus trabajadores con adicción, como es el caso de Josué, quien intenta retomar su vida.

“Que no den de baja al compañero instantáneamente, que nos den la oportunidad de ofrecerle tratamiento y que conserve su empleo. Lógicamente que el trabajador compruebe que está yendo a tratamiento en las instancias con las que tenemos convenio y nos ayudan con psicólogos”, indicó.

Esta problemática se refleja más durante la temporada baja, toda vez que algunas empresas manejan el concepto de “todo incluido”, y al tener tiempo de ocio, porque no hay clientes que atender, los trabajadores consumen el alcohol a la mano.