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Datos oficiales establecen 80 mil borregos en Quintana Roo. (Edgardo Rodríguez/SIPSE)
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Edgardo Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El rebaño ovino de Quintana Roo disminuye de manera alarmante a razón de por lo menos 600 animales semanales, según las evaluaciones de la Asociación de Ovinocultores del Caribe, pues hace dos años se estimaban más de 70 mil vientres y hoy en día menos de 57 mil, a pesar de que datos oficiales establecen 80 mil borregos.

Florencio Song Solís, presidente de la organización, mencionó que la cifra ha disminuido de manera considerable en los últimos años, debido a la gran demanda de carne de borrego que existe en todo el país ya que a nivel nacional se tiene un déficit de por lo menos 60 mil toneladas de carne, pues la producción no alcanza para satisfacer el consumo de los mexicanos.

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“A nivel estatal nuestros principales mercados se encuentran el zona norte del Estado como es Cancún, Playa y Tulum, pero también existen compradores que vienen de otras partes del país e ingresan por la zona sur del estado en camionetas y entran a comprar a los poblados, concentrando los animales en Xpujil y de ahí salen al centro de la república” afirmó el entrevistado.

Cabezas semanales 

A partir de este tipo de compra dijo que se están llevando un promedio de 600 cabezas semanales ya que son trasladados en siete u ocho vehículos para poder acopiar la mayor cantidad de animales posibles para poder revenderlos en otras regiones y otros estados.

Sin embargo, reconoció que el principal problema que esto representa es una disminución acelerada del rebaño local a consecuencia de la compra de vientres, principalmente, por lo cual se pierde opciones de poder recuperar las cabezas en un breve tiempo.

Además, recalcó que el precio que se les ofrece a los productores por sus animales es muy bajo, pero debido a las necesidades económicas, optan por vender sus borregos para poder mantener a sus familias y por ello se requiere de un plan emergente de repoblamiento y apoyo a la actividad ovina con lo que evitarían el estancamiento de la producción.

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