Cambio climático daña extracción de látex para producir chicle

La falta de lluvias ha reducido drásticamente la producción en Quintana Roo.

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La extracción del látex en Quintana Roo, principal materia prima para la producción de chicle orgánico, es una actividad que se ha visto afectada por la falta de lluvia. (Daniel Tejada/SIPSE)
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Alejandra Carrión/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La falta de lluvias provocó una reducción en la extracción del látex en Quintana Roo, la principal materia prima para la producción de chicle orgánico que es exportado a otros países, principalmente en Europa.

Manuel Aldrete Terrazas, director ejecutivo del Consorcio Chiclero S.C. de R.L.,  explicó que lo óptimo para la producción del chicle son 100 toneladas como mínimo, aunque con la sequía el año pasado se obtuvo entre 80 a 90 toneladas de látex.

Para el presente ciclo 2019-2020, la extracción a un no inició, debido a la intensa sequía que se ha registrado, aunque las estimaciones es de máximo 80 toneladas, una cantidad similar a la del año pasado.

“Estamos esperando las lluvias para iniciar. El cambio climático nos ha pegado desde hace tres años, porque ya las lluvias no son como antes; ya no nos llegan por temporadas y eso es lo que nos retrasa en la extracción del chicle”, señaló.

Explicó que en los meses de julio y agosto, es cuando se extrae el látex de los árboles, pero la sequía ha impedido que se lleve a cabo dicha actividad, es decir, los productores del campo deben esperar a que caigan lluvias fuertes para realizar los cortes del árbol.

Si bien esperan la temporada de lluvias para extraer el látex, ahora tienen de aquí a enero para obtener la mayor cantidad y elaborar el chicle para procesarlo y posteriormente distribuirlo en el extranjero.

Dijo que cada árbol de chicozapote en el estado genera hasta cuatro kilos de látex.

En el informe “En busca del equilibrio: uso, manejo y conservación de especies nativas”, realizado por la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio), muestra a Quintana Roo, como la entidad con mayor aprovechamiento chiclero.

De las 800 mil hectáreas detectadas en el sureste mexicano exclusivamente para la extracción de chicles, 500 mil están ubicadas en el estado.

Y una de las ventajas que posee la entidad es que por cada hectárea es posible encontrar hasta 25 árboles de chicozapote, especie de donde se extrae la materia prima para la elaboración del chicle.

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