Amaury Rodríguez/SIPSE
CANCÚN,Q. Roo.-En lugar de la reforestación que hizo la Dirección de Ecología del Ayuntamiento de Benito Juárez en los primeros cinco meses del año en los camellones centrales de la avenida Acanceh con Nichupté, Huayacán con Kabah y Tankah con Tulbayab, el representante del Colegio de Arquitectos, Lauro Trejo Pérez, recomendó ampliar las aceras con vegetación alta como en el Paseo de Montejo de Mérida, en Reforma e Insurgentes de la Ciudad de México y en el Acueducto de Querétaro.

“La gente no camina en los camellones, usa las banquetas que tienden a ser angostas en las calles, y la gran mayoría no tienen los árboles que proveen de sombra para protegerse del sol. En la avenida Huayacán se reforestó con palmeras que no dan sombra”, dijo Trejo Pérez.

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En los tres kilómetros del corredor de la avenida Huayacán se plantaron unos 350  árboles, entre palmeras y arbustos nativos, según la titular del área de Recursos Naturales y Proyectos Ecológicos, Marcela Castañeda Guerra.

Para el arquitecto, los ejemplos a seguir de microclima en el municipio de Benito Juárez son la avenida Cobá, desde la plaza Las Avenidas a la plaza Hollywood, el cruce de las avenidas Yaxchilán y Palenque, y la avenida Nichupté, desde la avenida Tulum a Pabellón Caribe.

“Lo ideal sería que Cancún tuviera túneles verdes para la protección al peatón. Se necesita hacer un análisis de la vegetación endémica, los framboyanes y almendros están viejos y secos, los laureles y ficus revientan las aceras.

“Hay que dejar en la zona urbana los cedros, caobos y chacas, que aunque son de lento desarrollo ofrecen a largo plazo confort climático en las calles”, señaló  el arquitecto Trejo Pérez.