Teresa Pérez/SIPSE
Ciudad de México.-La hipercolesterolemia familiar es una alteración genética hereditaria y su principal diagnóstico es presentar más de 300 miligramos de colesterol en la sangre, presentar protuberancias en talón de Aquiles y en nudillos de manos, sin embargo, es una enfermedad ignorada por los servicios de salud. 

Carlos Alberto Aguilar Salinas, jefe de la Clínica de Lípidos del Instituto Nacional de Ciencias Medicas y Nutrición, Salvador Zubirán, comentó la necesidad de que haya campañas para poner alerta a la población, pues esta enfermedad se produce debido a mutaciones en los genes que codifican al receptor de LDL que es el colesterol malo en la sangre.

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Refirió que la importancia en el diagnóstico temprano es porque quien presenta altos niveles de colesterol arriba de 300 tienen un riesgo mayor de presentar algún evento con el corazón y de no atenderse reducen su expectativa de vida.

“Estudios revelan que en cada núcleo familiar por lo menos ocurre una muerte por problemas cardiovasculares y en 70% de las personas que viven con colesterol alto sucede uno o dos eventos”, dijo el especialista.

Por ello quien en sus estudios clínicos salga con más de 300 de colesterol malo, la familia deberá poner atención, padres y hermanos, sobre todo cuando ya tienen antecedentes de infarto o problemas del corazón.