Arely Vázquez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El proyecto de movilidad en el transporte público para grupos vulnerables se quedó en el olvido con los cambios de gobierno; las rampas en toda la ciudad, paraderos especiales y señales en todos los camiones todavía no se llevarán a cabo.

El pasado 10 de marzo la Dirección de Transporte Público y Vialidad informó sobre esta propuesta para grupos vulnerables o personas con alguna discapacidad, la cual se entregaría al Congreso del Estado a través de la ex diputada Delia Alvarado.

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“Se respetarán estos espacios en los camiones públicos para personas de la tercera edad, embarazadas o con alguna discapacidad, además de leyendas y rampas”, explicó en su momento José Luis Castro Garibay, quien fungía como director de la dependencia.

La propuesta era construir rampas en toda la ciudad, paraderos con señalética para que la ciudadanía respete a estas personas, que dentro de los camiones se pintarían los dos primeros asientos de un color diferente y también tuvieran en las ventanillas señalización.

En Benito Juárez son más de 900 unidades de transporte público autorizadas para dar el servicio, entre Bonfil (100), Autocar (269), Maya Caribe (290) y Turicun (290); de éstas son 94 rutas.

De éstas, más de 80% de las unidades cuentan con señalización para personas con alguna discapacidad, y otras con asientos de color diferente; sin embargo,  falta cultura entre la ciudadanía porque no respetan los lugares.

También, a través de este proyecto se contemplaba dar difusión ante esta falta de cultura, de manera que los benitojuarenses hicieran conciencia sobre el respeto hacia estas personas.

La información sobre este proyecto se dio durante un evento en las oficinas del Sindicato Único de Trabajadores del Ayuntamiento de Benito Juárez.