Manuel Salazar/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Pese a contar con estándares que revelan baja mortalidad de partos complicados que deriven en la muerte de un recién nacido, la Secretaría Estatal de Salud, dispondrá mayores esquemas de apoyo y capacitación para un total de 168 parteras, quienes prestan sus servicios en la zona rural de los municipios de Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos.

El jefe de la jurisdicción Sanitaria número tres, Antonio López Juárez, explicó que uno de los principales objetivos que se persiguen al capacitar, actualizar y preparar mejor a las mujeres que atienden los alumbramientos en las comunidades, es reducir aún más la estadística sobre muertes relacionadas a complicaciones del parto, apuntando que de acuerdo a datos oficiales, solamente el 1.5 por ciento de partos se complica y el producto llega a morir.

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“Ese número nos habla de una actualización y sobre todo la habilidad que tiene la partera para ofrecer apoyo y atención a la mujer durante el embarazo y en momentos de trabajo de parto, pero lo ideal es precisamente que no se registre ninguna muerte; queremos mediante capacitaciones y talleres que se han perfilado para el segundo semestre de este año, dar mejores herramientas y habilidades a las parteras para lograr ese objetivo”, aseguró.

Recordó que en los dos últimos años no se han registrado muertes de niños por complicaciones de parto en el centro del estado asegurando que ello se debe más que nada a la responsabilidad que han demostrado las parteras para canalizar en forma oportuna a una mujer hasta una clínica o centro hospitalario al momento en que se detecta que existe un embarazo de riesgo ya sea para el producto o para la madre.

El funcionario del sector salud explicó que de acuerdo al programa de capacitación que preparan para las parteras se les convocará cada dos meses para que con el personal médico disipen dudas e intercambien experiencias, además se les dará material de apoyo necesario para su trabajo como benzal, alcohol, suturas, vendas y diversos implementos que opfrecerán mayor garantía de que la vida de la madre o el recién nacido no reporten complicaciones graves.