Iván Romero Castillo, artesano de la capital de Quintana Roo, advierte que desde hace dos semanas han registrado pérdidas por la cancelación de eventos ya programados, así como nulas ventas.

“Del 2 al 5 de abril teníamos agendada la tercera edición de la Expo Cultura en Chetumal, pero por obvias razones tuvimos que cancelarlo. Eran más de 140 artesanos del sur de Quintana Roo los que se iban a dar cita en esta expo, que para muchos de nosotros representaba el 80% de nuestros ingresos hasta la temporada vacacional de Semana Santa”, puntualiza.

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El artesano explica que aún antes de la contingencia por el Covid-19, el sector artesanal de Quintana Roo enfrentaba una difícil situación, ya que la pérdida de turismo en la capital del Estado provocaba que sus ventas apenas alcanzaran los 2 mil pesos semanales, apenas suficientes para poder sobrevivir.

“Si queríamos tener buenas ganancias, era necesario trasladarnos a Bacalar o Mahahual, donde las artesanías locales tienen mayor demanda gracias a los turistas extranjeros. Sin embargo, eso también implicaba mayores gastos, tanto de transporte como de alimentación y hospedaje, pues para ser rentable era necesario quedarnos de dos a cuatro días en esos lugares”.

“Pero ahora, con la contingencia, no tenemos esa entrada de dinero. De hecho prácticamente ninguna. Las ventas se desplomaron porque la gente prefiere gastar solo en los artículos necesarios como comida e higiene”, puntualiza.

Iván Romero añade que han acudido varios grupos de artesanos al Instituto de la Cultura y las Artes de Quintana Roo para solicitar apoyo durante esta etapa, o al menos conocer los lineamientos de ayuda informados por el gobernador Carlos Joaquín González.

“Nos dieron palo. Solamente respondieron que estemos atentos a los canales oficiales para acceder a esas ayudas, pero que ellos no iban a gestionar nada. Pedimos hablar con la titular Jaqueline Estrada Peña pero nos respondieron que desde hace mucho no se presenta en las oficinas. Nos enoja, porque cuando necesitan que aparezcamos en sus eventos culturales nos buscan, nos llaman. Pero ahora que necesitamos de ellos, nos abandonan”.