La clínica hospital del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) en Cancún cerraron la consulta externa y laboratorios hasta nuevo aviso.

Afuera del nosocomio, el personal administrativo colocó letreros informando a la derechohabiencia la nueva disposición que fue tomada a raíz de la emergencia nacional por COVID-19 en México.

En el caso de los exámenes de laboratorio, se indicó que sólo se tomarán muestras de los pacientes agendados y que sean necesarios para su envío a Mérida, Ciudad de México (sólo oncología y hematología) y para la realización de hemodiálisis.

Al respecto de los trámites administrativos, sólo se pagarán cheques de las personas jubiladas, todos los demás quedan suspendidos indefinidamente.

“Hay gente que viene de otros municipios, por ejemplo, en la tarde llegó un joven de Playa del Carmen que venía por consulta de especialidad: llega y resulta que no hay, entonces gastó solamente su pasaje, se tiene que regresar con toda la molestia que tiene”, dijo uno de los trabajadores que prefirió el anonimato.

En tres años, la derechohabiencia del Issste en la zona norte del estado se elevó de 50 a 70 mil personas, lo que significa un aumento del 40%, sin embargo los proyectos para la ampliación del hospital en Cancún están detenidos desde hace más dos años, pese a la promesa de Luis Antonio Ramírez Pineda, director nacional del Instituto, de reactivar el financiamiento de infraestructura para Quintana Roo.