Alejandro Malagón, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos, (Concamin), aseguró que están listos para analizar, junto con las entidades por donde pasa el Tren Maya, cómo se trabajará a fin de que el ferrocarril sirva para traer productos del centro y norte del país hacia la Península de Yucatán, especialmente a Quintana Roo.

Reconoció que la construcción del Tren Maya ha traído un dinamismo económico para la región, pero sí es importante saber qué tipo de productos traerá hacia la región. De acuerdo con cifras oficiales publicadas en la página del Tren Maya, el servicio de mercancías tendrá una carga máxima por eje de 32.5 toneladas.

El servicio de carga iniciaría en 2026 y se incorporará al puerto de Progreso, Yucatán, además de trasladar mercancías de Salina Cruz, Oaxaca, y Coatzacoalcos, Veracruz, hacia la península.

Entre los materiales que estaría trasladando en primera instancia serán de construcción. Sin embargo, también hay empresas, en otros rubros, interesadas en que sus productos también se incorporen.

El transporte de mercancías correrá a una velocidad de 72% superior a las vías actuales, y 12% superior que el de autotransporte. La velocidad máxima del transporte de carga será de 120 kilómetros por hora, mientras que la de pasajeros, de 160 kilómetros por hora.

En una primera fase se espera que mueva 2 millones de toneladas al año, y en una etapa máxima hacia 2053, que capte 12.53 millones de toneladas anuales. El tren recorrerá los estados de Campeche, Chiapas, Tabasco, Quintana Roo y Yucatán.

“Que el tren pueda tener un tema de carga es un complemento, pero hay que esperar un balance, pues por el momento no sabemos muchos datos sobre el tema, pero veo que es algo bueno que el transporte siempre tenga una mezcla de carga, es decir, sea híbrido”, sostuvo. Aseguró que no se prevé una afectación a la operatividad del transporte de carga terrestre; sin embargo, es algo relativamente nuevo para saber su beneficio.