Edgardo Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q.Roo.- Continúa el litigio de las tierras donde se ubican algunas instalaciones del consorcio chiclero Chiczá, debido a que el Ejido Santa Elena reclama la posesión de las tierras, misma que en un inicio, fueron otorgadas en calidad de préstamo a la 34 Zona Militar para el desarrollo de un vivero forestal.

No obstante, una vez cerrado el vivero por parte de los elementos castrenses, el predio quedó sin ser utilizado, por lo que, según la versión del ejido, la empresa exportadora de chicle orgánico tomó posesión del predio; sin embargo, el núcleo ejidal reclama las aproximadamente cinco hectáreas que actualmente están siendo utilizadas por el consorcio. Ante esto, el consorcio chiclero dijo desconocer alguna acción legal en su contra.

De acuerdo con el comisariado del núcleo ejidal de Santa Elena, Sergio Varguez Chan, las tierras donde se ubican algunas de las instalaciones del consorcio chiclero pertenecen legalmente al ejido antes mencionado, ya que cuentan con documentos abalados por el Registro Agrario Nacional (RAN), que respaldan dicha afirmación, además de que el terreno sólo fue entregado a la 34 Zona Militar en calidad de préstamo, puesto que hace algunos años las fuerzas castrenses solicitaron un área de aproximadamente cinco hectáreas para ser usadas como vivero forestal.

Aunque los militares habían iniciado un trámite para tener uso pleno de las tierras, el proceso fue cancelado, en vista de que el Ejército decidió abandonar el vivero forestal. Como consecuencia, el terreno regresó a posesión del Ejido Santa Elena, pero las tierras no fueron usadas por el ejido, puesto que no se tenía un plan para la posterior aplicación de las tierras, por lo que las tierras permanecieron en aparente abandono por poco más de nueve meses.

Durante este tiempo, el Ejido Santa Elena no tuvo registro de algún trámite de petición sobre la posesión de los terrenos por parte del consorcio chiclero, por lo que aseguran que existe una aparente invasión de tierras, hecho que, según la fuente ejidal, está siendo analizado por el RAN.

Según la versión del consorcio chiclero, no tiene conocimiento de algún litigio o juicio por estas tierras, pues el tribunal agrario es el que determinará quién tiene la posesión legal de las tierras.