Akumal, la joya turística en disputa

Empresarios mexicanos y extranjeros defienden su derecho a cerrar el acceso al mar.

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Paul Sánchez Navarro, director del Centro Ecológico Akumal. (Adrián Barreto/SIPSE)
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Adrián Barreto/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- Una disputa se ciñe sobre Akumal. Empresarios mexicanos y extranjeros cobijados en el manto de la protección ambiental que promueven a través del Centro Ecológico Akumal (CEA), defienden su derecho a cerrar el acceso al mar que desde hace tres décadas pisan habitantes del poblado, en tanto reclaman ser dueños legítimos de una extensión de tierra costera que incluye 112 mil metros cuadrados que Promotora Akumal del Caribe S.A. de C.V. donó al Gobierno del Estado para urbanización en enero de 1975.

Según el director del CEA, Paul Sánchez Navarro, desde hace 34 años (1979) fueron comprados los terrenos donde están hoteles como Club Akumal Caribe, Las Casitas Akumal, Los Bungalows, tiendas y restaurantes que rodean el acceso al mar, y la compra fue con escrituras. Esos proyectos resultaron de fraccionar el terreno que era de Promotora Akumal del Caribe, cuyo socio mayoritario era Pablo Bush Romero.

En el permiso para fraccionar que fue publicado el 20 de enero de 1975 en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Quintana Roo, Promotora Akumal del Caribe donó al Gobierno 112 mil metros cuadrados para calles, accesos y plazas, además de 2 mil 500 metros cuadrados para construir una escuela primaria, una guardería y 500 metros más para oficinas de gobierno.

Nada de eso fue construido. Sánchez Navarro se negó a mostrar copia de la escritura que dicen tener y que les da la propiedad de todo lo que en la Akumal costera se encuentra, y por cuyo derecho que reclaman cerraron, por cuarta ocasión, el acceso al mar y que desencadenó la protesta de los habitantes del poblado de Akumal, ubicado en el lado poniente de la carretera federal.

El delegado de Akumal, Melchor Aguiñaga Rosado, asegura que el CEA sí tiene una escritura, pero data del 2011. De ella nada habló Sánchez Navarro, pero el delegado asegura que la consiguieron de manera turbia amparados por una notaría que tiene sede en Cancún.

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