Paloma Wong/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Más de 70 familias de la comunidad de Monte Olivo, del municipio de Bacalar, presentan riesgo por casos de diarrea, debido al consumo de agua de pozo contaminada, tras dañarse la celda solar que proveía energía eléctrica al sistema de bombeo que les abastecía de agua potable a sus habitantes. Sin embargo, el problema está bajo control según la Secretaría Estatal de Salud (Sesa). 

El agua no esta contaminada

Los habitantes de la comunidad de Monte Olivo consumen agua de pozo, misma que también sirve a la agricultura y ganadería de la región, lo que convierte al poblado en un foco rojo, pues no hay un saneamiento adecuado en el lugar. 

Detalló que el agua del lugar no está contaminada, pero sí requiere un saneamiento especial, pues requieren de mayor cantidad de cloro para tener agua potable y consumirla. 

Enfermedades diarreicas

El problema deriva de un mes, por lo que las autoridades sanitarias respectivas tanto del estado como del municipio trabajaron en el lugar para evitar el incremento de enfermedades diarreicas. 

El jefe de la Jurisdicción Sanitaria Número Uno, Francisco Lara Uscanga dijo que las acciones preventivas ya fueron aplicadas y los casos están bajo control, pero se mantendrá una vigilancia constante para evitar un brote de diarrea.

Hospital de Bacalar

En tanto, el director de los Servicios Estatales de Salud, Tomas Contreras señaló que la incidencia de diarreas ha sido baja, pues el hospital de Bacalar registra en la última semana 13 casos, mientras que a nivel municipal son 31 casos confirmados en lo que va del año, cifra que incrementa lentamente cada semana, pues la semana pasada habían 21 casos.