Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Cuando hay sudoración intensa y mucha sed es necesario hacerle caso al cuerpo, pues son indicadores de que hay un cuadro de insolación y agotamiento, y si una persona está expuesta a altas temperaturas por el sol, áreas de trabajo como cocina, permanecer mucho tiempo en un vehículo, o realiza ejercicio en lugares cerrados, será presa fácil de este cuadro, incluso de que presente un golpe muy fuerte de calor que pondrá en riesgo la vida.

Gabriel Jesús Salazar Estrella, especialista en medicina de emergencias, del Hospital Galenia y en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explicó que por esta causa las atenciones médicas aumentan en el servicio de urgencias.

Dijo que es importante definir lo que es un golpe de calor, para que esto ocurra el paciente debe presentar una temperatura arriba de 41 grados centígrados, de lo contrario, no es como tal un golpe de calor, éste es potencialmente mortal debido a que hasta el 60% de los pacientes puede morir.

El golpe de calor clásico, muy común en esta ciudad, ocurre en personas expuestas al sol por diversión, porque trabajan al aire libre, quienes laboran en cocinas, barcos, o donde se desarrollan temperaturas extremas por los hornos.

El hecho de que una persona haya nacido en la Península de Yucatán la hace más resistente a las temperaturas extremas, sin embargo, no los exime de padecerlo. En el caso de los visitantes, al no estar acostumbrados en ellos ocurren síncopes o agotamientos por calor, cuando su temperatura es arriba de los 38 grados, pero no supera los 41, debido a la exposición al calor y a la deshidratación.

Si se realiza ejercicio en espacios libres en horas donde no se exponga tanto a los rayos del sol, es decir, por la mañana de 6 a 8 del día, y por la tarde después de las 6 horas, todos deben hidratarse antes de la exposición solar. La Organización Mundial de la Salud (OMS), sugiere ingerir al menos 250 mililitros de agua antes de exponerse al sol. En caso de actividad física, cada 4 kilómetros se debe hidratar con agua o suero oral.

Cuando se tiene una sed intensa o se empieza con una sudoración profusa, requerirá descansar en ese momento, buscar un lugar cálido bajo la sombra y tomar agua para saciar la sed.

Si se presenta temperatura corporal de más de 40 grados centígrados provocados por la exposición al sol, debe recibir atención médica, pues después de la segunda hora, la probabilidad de vida bajará al 60%, y en las cuatro horas posteriores si no es atendido causará la muerte.