Licety Díaz/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El mural del cárcamo de agua de la avenida Sayil que años atrás sufrió actos de vandalismo y que desde octubre de 2015 un nuevo artista lo retomó, tiene un avance de un 90%, dijo el artista plástico del proyecto, Miguel Guzmán.

Con el afán de rescatarlo y que los cancunenses tengan un espacio de deleite cultural, combina el proyecto original que fue realizado por el artista plástico Otoniel Salas en 2008, mismo que dio continuidad a la obra en 2011, fecha en que fue grafiteada la obra, mezclando dibujos de su inspiración.

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Guzmán se centra en el muralismo y figuras en tercera dimensión con la utilización de materiales reutilizables como plástico y pet para los volúmenes de las piezas que pega cuidadosamente hasta que tenga forma la figura que desee, en caso necesario también usa papel y así la solidifica para luego pintarla.

El cárcamo de la Supermanzana 16 de aproximadamente 200 metros, abarcará tres bardas con obras artísticas, lo que ha hecho es rescatar una barda de la obra de Salas basado en el tema: “Matices del Popol vuh”, que en español significa libro del consejo o de la comunidad y las otras dos bardas tienen su sello.

Del proyecto original quedan los manglares y los mayas, respetando el estilo del creador, a las que se integra ahora aves, hormigas gigantes, un maya y un jaguar de cuatro metros de largo, en tercera dimensión, además de una pintura de representación del mar y cenotes que dan alusión al uso del agua en el destino.

Para la elaboración del mural utiliza pintura a base de agua acrílica y al concluirla le colocará una cubierta de poliuretano resistente a cualquier clima, lavable en caso que se intente grafitearse, explicó.

Se espera que dentro de dos semanas quede listo, aunque el plan es de mejorar toda el área con jardineras y que sea un punto de recreación agradable al ser un espacio único, informó Alejandra Mayorga Rodríguez, responsable de relaciones con la comunidad de la empresa Aguakán.

Entre las obras que destacan de este artista, está el oso hormiguero en el Museo de la Evolución de Puebla, y especies marinas que realizó con Amigos de Isla Contoy.