Alumnos de primaria arriesgan el físico para comprar su lunch

Padres de familia denuncian que los comerciantes ambulantes bloquean el acceso principal de una escuela de la capital.

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La presencia de los vendedores se ha reportado en varias ocasiones a las autoridades, sin embargo, el problema persiste. (Archivo/SIPSE)
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Benjamín Pat/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El exceso de vendedores ambulantes a las afueras de la escuela primaria “Solidaridad” de la la capital del estado, provocó ayer la inconformidad de un grupo de padres de familia, quienes no pudieron como de costumbre entregar el “lunch” a sus hijos, durante la hora de receso, ya que los comerciantes de comida chatarra ocupaban todo el acceso principal.

De acuerdo con Bresnec Chi Tuyub, padre de familia, por necesidad los padres llevan durante el receso el desayuno para sus hijos, sin embargo, en los últimos días los vendedores ambulantes obstruyeron el paso, por intentar vender. Esto a pesar de que el Reglamento de Othón P. Blanco, establece que dichos vendedores deben estar por lo menos a 100 metros de distancia del plantel.

“Ahora que venimos a traer el desayuno, están bloqueando la entrada y no podemos ver a nuestros hijos, incluso por esta situación que estaban amontonados los niños del otro lado, uno se cayó y se golpeó la cabeza. El director debe poner orden, porque al interior del plantel hay una señora que vende alimentos y no debe darse esta situación”, destacó.

Por su parte, el director del plantel, Francisco Javier Basto Pech, dijo que el problema surgió porque la concesionaria de la venta de alimentos al interior de la escuela, bajó la calidad de su servicio, lo que provoca que los niños prefieran comprar con los vendedores ubicados a las afueras.

En este sentido, señaló que en coordinación con la sociedad de padres de familia, se pondrá un ultimátum a la concesionaria, y de no mejorar el servicio será suspendido su permiso. 

En el caso de los vendedores ambulantes, dijo que se ha reportado en varias ocasiones a las autoridades municipales, no obstante, el problema persiste.

“Es verdad que la señora que vende, ya no hace la comida igual, y eso hace que compren en la afueras, pero esto genera un problema con los papás. Nosotros vamos a revisar el caso y si no hay mejora en la calidad, se retirará la concesión”, concluyó. 

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