Desahoga Carlos Joaquín la deuda pública

La actual administración estatal ha bajado el crecimiento de los compromisos financieros y los plazos de pago, luego del adeudo de casi $40 mil millones heredado por Roberto Borge Angulo.

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Después del crecimiento exponencial de la deuda pública de Quintana Roo, registrado durante el sexenio de Roberto Borge, con un monto acumulado de casi 40 mil millones de pesos, en los últimos años se redujo tanto el crecimiento de los compromisos financieros, como los plazos de pago.

“Los hallazgos que hoy compartimos demuestran que el gobierno de Carlos Joaquín fue uno de los más responsables, además del encabezado por el gobernador Pedro Joaquín Coldwell. Por ejemplo: en término de plazos, que es una de las principales preocupaciones de la población y el sector empresarial: cuánto tiempo vamos a tardar en pagar la deuda: la de Roberto Angulo estableció refinanciamientos que comprometían las finanzas estatales por 30 años hasta el 2046,  mientras que el del actual gobernador con el refinanciamiento del 2020 la redujo al 2045, quedando en un plazo real de aproximadamente 25 años”,

citó el especialista León Ricardo Lizárraga Cubedo, presidente del Consejo Directivo del Instituto de la Administración Pública local.

Durante la presentación de la “Génesis de la Deuda Pública del Estado de Quintana Roo 1975-2022”, detalló que la Deuda Pública en 2016 representaba un 6.4% del Producto Interno Bruto del Estado (PIBE), mientras que en 2021 cerró en un 5.4%.

En ese año se registraron menos ingresos por los estragos de la pandemia de Covid-19 en el sector turístico, principal motor de la economía quintanarroense, por lo que para 2022, con la reactivación económica al 100%, se espera que la deuda represente aún un menor porcentaje del PIBE.

Según el informe, en 2016, si la deuda estatal se dividiera entre cada habitante, debería pagar 13 mil 475 pesos, mientras que en 2021 esta cantidad bajó a 10 mil 386, cifra que aún está muy por encima del promedio de los estados, que es de 3 mil 935 pesos con corte a este año.

Añadió que la deuda no es “mala” en sí, ya que gracias a ella es posible lograr proyectos de inversión para la sociedad. De 1975 a la fecha las diferentes administraciones estatales han solicitado 39 créditos financieros, por un monto acumulado de 128 mil millones de pesos.

“Pero tenemos que dejar en claro cuál es el contexto de la deuda pública, porque se tuvieron que enfrentar situaciones extraordinarias en Quintana Roo. Endeudarse no es necesariamente malo, siempre y cuando ese recurso se haya invertido en obra pública o permita enfrentar una emergencia, como sucedió en el 2020 con la pandemia del Covid-19”,

agregó Lizárraga Cubedo.

Aseguró que este estudio permitirá a las próximas administraciones conocer tanto el origen de los compromisos financieros que arrastra la entidad, como lo que se debe hacer para que no se incremente a un nivel peligroso e insostenible.

Añadió que gracias a que se tuvo un manejo responsable de la deuda durante esta administración, el gobierno de Mara Lezama, que iniciará en septiembre próximo, tendrá un mayor margen de maniobra financiera, lo que permitirá destinar más recursos a rubros prioritarios como salud, educación, etcétera.

Actualmente, el Gobierno del Estado debe 23 mil 729 millones de pesos, y paga anualmente 2 mil millones de pesos de intereses y capital, lo que significa que gasta casi el 5% de los ingresos estatales en el pago de la deuda.

“Pero también este trabajo es para que la población tenga un mayor acceso y seguimiento a este punto, sin tantos puntos técnicos”, declaró.

Destacó que Quintana Roo sobresale por haber logrado en los últimos años superar 14 crisis económicas, 14 fenómenos naturales, seis fenómenos naturales de sargazo, y cuatro crisis sanitarias.

Añadió que gracias a que se tuvo un manejo responsable de la deuda, la siguiente administración, que iniciará en septiembre próximo, tendrá un mayor margen de maniobra financiera, lo que permitirá destinar más recursos a rubros prioritarios como salud, educación, etcétera.

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