Por deuda ajena de $50 mil pierde propiedad de $2 millones

Elementos policíacos y personal del bufete de abogados lo desalojaron junto con su familia.

|
La deuda ascendió a aproximadamente 300 mil pesos. (Carlos Horta/ SIPSE)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Ángel Castilla/ SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Felipe López Heredia perdió casa y negocio al surtir efecto una orden de embargo para cubrir un adeudo contraído por su ex mujer y en el que el ahora afectado fungió como aval solidario.

Elementos policíacos y personal del bufete de abogados Corporativo Ojeda y Asociados lo desalojaron junto con su familia del inmueble donde vivieron más de 17 años.

También te puede interesar: ¿Sabías que puedes hacer ‘inembargable’ tu vivienda?

Con lágrimas en los ojos, el afectado, dijo que no era justo, ya que la vivienda tiene un valor de dos millones de pesos, además de asegurar que cumplió con los pagos, pero la mujer que pidió el dinero ahora no aparece.

Dijo que su error fue haber sido aval de María Elena Solís Farrera, quién en el año 2011 pidió prestado 50 mil pesos a Nancy Aguilar Cámara.

Aseguró que en año 2012, le dio 50 mil pesos a María Elena Solís Farrera para que diera como abono de la deuda, pero que por desgracia, no sabe nada referente a pagarés o expediente alguno, y a su entender, el compromiso de pago, por su parte, ya terminaba y la deuda ascendió a aproximadamente 300 mil pesos.

Jorge Alejandro Canché Valdez, abogado de Nancy Yamili Aguilar Cámara, señaló que después de tres años, y ante la falta de pago por parte del aval, la deuda ascendió.

Cobro de la deuda

Por lo que conforme a derecho, la etapa procesal del juicio ya finalizó, y se efectuó el cobro de la deuda con el bien que garantizó el pago.

Durante todo el proceso, el demandado cambió como cinco veces de abogado, y siempre hubo la apertura para establecer pláticas y tratar de llegar a un acuerdo por la parte demandante, pero desafortunadamente, nunca hubo una respuesta favorable por la parte demandada.

Grave error

Agregó que supuestamente el demandado cuenta con otras propiedades, y estaba esperanzado en vender alguna de ellas para finiquitar la deuda, pero el juicio llegó a su fin, y nunca efectuó alguna venta.

El movimiento del mediodía, provocó que los vecinos del lugar salieran a ver qué ocurría, y observaron al propietario de la panificadora postrado en una silla, apoyado en su bastón, lamentando lo ocurrido.

Lo más leído

skeleton





skeleton