Dulces regionales, los más demandados en Día de Muertos

Estas creaciones artesanales se venden en mayor cantidad que las importadas.

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Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Los bacalarenses prefieren los dulces de calabaza, yuca, camote y papaya para adornar sus altares, sin importar que tienen la opción de cocadas, camotes, jamoncillos, higos cristalizados, fantasmas de caramelo, calaveras de chocolate y cráneos de azúcar, entre otros productos traídos del centro del país.

Mirna Cahuich Tox, de la comunidad de Altos de Sevilla reservó sus frutas para la elaboración de dulces en esta temporada, los cuales comercializó en su totalidad, a diferencia de otros que no son de la región y que no se vendieron tan bien, pese a tener figuras representativas de estas fechas.

Año con año, esta mujer acude a vender sus creaciones a la cabecera municipal de Bacalar y, en ocasiones, a Chetumal. Ella comercializa en 20 pesos la bolsa sus productos, los cuales diversifica con dulces de azúcar a los cuales les gana dos pesos cada pieza, mismos que traen del centro del país, según comentó.

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Sin embargo, de 40 piezas que trajo, sólo vendió 12 de este tipo, pues la gente prefirió los dulces de la región, los cuales elabora con jarabes de azúcar y que son hervidos con el mismo endulzante, lo que le redituó mayores ganancias.

Por ello, considera que el próximo año expandirá más su negocio con sus pequeños hijos, ya que significa una oxigenación a las finanzas de su familia.

Calculó que de la venta de su producto de tres días, obtiene una ganancia neta de poco más de mil pesos, aunque eso significa que tiene que desvelarse para preparar sus dulces y posteriormente, trasladarse más de 40 kilómetros para comercializarlos.

“Es duro, pero no tenemos opción, ya que no contamos con fuentes de empleo”, dijo.

En el mercado municipal, el parque central y sobre la avenida Libramiento, es común observar puestos improvisados de venta de dulces de la región, los cuales diversifican con otros de jamoncillos, conservas de tejocote, guayaba, cráneos de azúcar, calaveras de chocolate, cajeta o amaranto, panes de ánimas y piruletas calacas, entre otros, aunque a decir de los mismos comerciantes, la gente opta por lo regional.

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