El proceso electoral ya inicio los partidos políticos afinan estrategias y definen candidatos en tanto el INE supervisa que esto transcurra conforme a la norma. Es, o debiera ser, una fiesta de la democracia; también de los ciudadanos depende que sea así: con el aliento y el respeto a la diversidad. Lo cierto es que los cambios debidos a la irrupción de los medios de comunicación sociales han afectado la vida de las personas y de la sociedad en general, incluso los partidos están descubriendo un nuevo canal de comunicación con los ciudadanos, a través del cual tienen que lograr una nueva forma de hacer y pensar la política.

Los cambios por la irrupción de los medios de comunicación sociales han afectado la vida de las personas y de la sociedad en general. La particularidad de estos nuevos comicios venideros es que están marcados por el papel aún más predominante que juega internet en este proceso, como consecuencia de la evolución que ha tenido el acceso a la red en los últimos cuatro años. Hoy en día los internautas pasan más de  horas al día conectados; buscando información, leyendo noticias, viendo videos y compartiendo en redes sociales. Invierten más tiempo en internet que en otros medios de comunicación como TV, radio y prensa.

Pero muchos creen que el político más influyente es quien más seguidores tiene en las redes. Ello es una lectura parcial, puesto que el nivel de influencia se mueve por otros patrones diferentes a la cantidad de seguidores. Igual que en los medios tradicionales, ser el más popular no es ser el más creíble. Muchos políticos tienen miedo de estar en las redes sociales porque éstas pueden hablar mal de ellos, como si, por ejemplo, en la televisión hablaran bien. Las redes sociales no piden permiso para hablar de los políticos, por lo que estar en ellas, gestionar los flujos no constituye una opción, sino una obligación. 

En unos meses iniciarán campañas en el país, siendo la presidencial una oportunidad aún más interesante para observar el impacto de internet en los comicios. Vale la pena resaltar que en diversas elecciones presidenciales latinoamericanas se ha detectado una tendencia de correlación entre la popularidad de los candidatos en contienda y el número de búsquedas en Google acerca de cada uno, lo que evidencia cómo internet refleja un sentir ciudadano durante los comicios.