Renán Moguel/SIPSE
CANCÚN, Q.Roo.- Inversionistas inmobiliarios nacionales ven en los desarrollos verticales la oportunidad de diversificar su producto y ayudar a brindar mejores servicios básicos a la población de Cancún, que en los últimos años se extendió de manera horizontal hacia la periferia de la ciudad y en la cual se crearon cinturones de miseria.

Corporativos como Lemmus Inver México y Puerto Cancún, que se especializan en desarrollos residenciales verticales, destacaron que este aspecto es una manera de diversificar y redimensionar a la ciudad para entrar al nuevo plan de un país en desarrollo.

Miguel Ángel Lemus Mateos, CEO (jefe ejecutivo) de Lemmus Inver México, aseguró que la mejor forma de beneficiar y consolidar una ciudad es crecer hacia adentro y hacia arriba porque los gobiernos no tienen la capacidad suficiente para dotar de infraestructura a una mancha urbana que se expande cada vez más.

“La verticalización brinda la oportunidad del redimensionamiento urbano, es el momento de hacer un análisis profundo y redistribuir los usos de suelo y rehacer áreas habitacionales”, afirmó.

Explicó que los desarrollos verticales que se tienen actualmente en Cancún brindan una mejor calidad de vida, mejor seguridad y una mejor vista al Caribe que los complejos horizontales.

Dijo que hay empresas constructoras que ya tienen planes de construir vivienda vertical, ya que saben que tendrían más éxito y mejor absorción del mercado.

Estos desarrollos se darían con Grupo Vivo que desarrollaría Paraíso Maya y Torres La Guadalupana; Grupo Sadasi, con Prado Norte del Grupo Sadasi; y Urbi, con Villas del Rey, quienes proyectan dos mil viviendas para los próximos tres años.

Al igual que esas empresas también hay desarrollos residenciales como el Btowers, que tendrá en venta próximamente 20 departamentos de lujo; y otros más en Puerto Cancún dirigidos a un sector más exclusivo. 

Rafael Lang Uriarte, director de proyecto de Puerto Cancún, aseveró que el tema de los desarrollos verticales llevaría al destino a un nuevo modelo de ciudad, ya las tendencias han demostrado que los lugares más compactos en cuanto a su extensión territorial son más eficientes y con una mejor calidad de vida para sus usuarios.

Destacó que el crecimiento horizontal de Cancún merma la calidad de vida de sus habitantes, debido a que se tienen que desplazar grandes distancias para poder ir a sus centros de trabajo, lo que ocasiona que tengan que invertir más tiempo y dinero.

“Hoy se tienen trabajadores que hacen hasta una hora y media para acudir a sus centros de trabajo y el mantenimiento de servicios municipales es mucho más caro”, destacó.

Explicó que todas las ciudades que tuvieron el modelo de crecimiento horizontal ya implosionaron y que muestra de ello es la Ciudad de México, donde las primeras colonias se vuelven a poblar y a pesar que se vive en espacios más pequeños, el trabajador se ahorra tiempo y dinero que puede aprovechar para estar con su familia.

El también dirigente del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe (CCEC) precisó que se tiene que revisar el modelo de desarrollo de nuestra ciudad, por lo que buscarán pujar por un crecimiento vertical para aprovechar los espacios que se encuentran abandonados en el primer cuadro.

Lang Uriarte comentó que muchas personas quizá manifiesten su desinterés o preocupación por este tipo de desarrollos, al considerar que al ser Cancún una zona de huracanes representaría un riesgo, pero que se cuidaría que los desarrolladores estén conscientes de la problemática.

“Hay edificios de hasta 20 pisos que resisten los embates de cualquier fenómeno atmosférico, Puerto Cancún siempre le ha apostado a la verticalidad y aquí no modificaremos nuestros plan maestro de desarrollo”, aseguró.