Jorge Carrillo/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La elevada carga impositiva y la homologación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en las zonas fronterizas, entre otros aspectos económicos propios del sur de la entidad, han ocasionado el cierre de comercios; en tanto, en Corozal, Belice, a escasos 10 kilómetros de la capital del estado, se anunció que en 15 días se iniciará la construcción de una nueva Zona Libre “VIP”, con una inversión de 50 millones de dólares, unos 642 millones de pesos, anunció el cónsul de Belice en Chetumal, Jorge Valencia Gómez.

El diplomático señaló que aunque se realizó un cambio de inversionistas el proyecto sigue en pié y el inicio de su construcción está programado para diciembre próximo.

Valencia Gómez agregó que este nuevo paraíso fiscal dará empleo en una primera instancia a unas mil personas, fuente que también podrá ser aprovechada por habitantes y empresarios de esta capital.

Precisó que en el proyecto de la nueva Zona Libre la mayoría de los inversionistas son de procedencia estadounidense, aunque como en todos los paraísos fiscales habrá oportunidad para todo el que desee desarrollar sus capitales.

El Cónsul Honorario consideró que pese a que los empresarios locales ven a esta nueva zona comercial libre de impuestos como la que pondrá fin a la actividad comercial de Chetumal, pudiera ser al contrario, pues se impulsará la demanda de otros servicios que se pueden ofrecer y que darían un plus a la capital del estado.

Expresó que los empresarios capitalinos deben observar al proyecto como una oportunidad para diversificar los servicios, pues se espera que los clientes que se recibirán serán de alto poder adquisitivo.

Precisó que este complejo comercial se establecerá una vez que se cruce el nuevo Puente Internacional México- Belice, colindando con la aduana del vecino país, y constará de tres etapas: la primera de estas se edificará en un plazo de un año.

Para el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Jorge Marzuca Ferreiro, la Zona Libre de Belice hasta el momento es la única opción viable para que los empresarios locales continúen con sus actividades, pues de este lado de la frontera dejarán de ser competitivos.