Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Casas de empeño en la capital del estado reportan baja actividad, aunque confían que en diciembre haya más fluidez de recursos, principalmente para desempeño.

Rosa Ofelia Chan Medina, propietaria de una institución prendaria en Chetumal, informó que, aunado a la poca actividad, las casas de empeño son “acosadas” por instancias de gobierno, lo que ha motivado a varios de sus agremiados a desistir del mercado.

“Nos aplican impuesto tras impuesto, el municipio nos cobra 16 mil pesos por la licencia de funcionamiento y la licencia prendaria. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) hace visitas cada tres meses y además de que nos sancionan con mil pesos, nos coloca sellos”, lamentó.

Consideró que este año ha sido muy difícil, puesto que tampoco han tenido un repunte importante en empeños.

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“Lo que más vienen a empeñar son celulares, pero yo no los agarro porque no tienen factura y tampoco los vienen a sacar. En realidad, es que la gente no tienen nada que empeñar, porque lo poco o mucho que tienen lo sacan a crédito”, explicó.

El encargado de la casa de empeño “La Única”, ubicada sobre la avenida Maxuxac, mencionó que será hasta finales de noviembre, y principios de diciembre cuando haya mayor actividad.

“Antes de que paguen el aguinaldo es cuándo tendremos actividad, porque la gente empieza a empeñar, consciente de que lo sacarán después. Lo que más conviene es que empeñen oro y plata, porque los artículos domésticos o personales no, nos dejan ningún beneficio a ni a ellos ni a nosotros”, declaró el comerciante, que no quiso divulgar su nombre.

A principios de este año, la Profeco estimó la existencia de unas 20 casas de empeño en la ciudad; sin embargo, mediante un recorrido por la ciudad capital, se constató que algunas casas han cerrado de manera definitiva.