Enrique Mena/SIPSE

CHETUMAL, Q. Roo.- El municipio Othón P. Blanco y la frontera que mantiene con Belice resulta ser el paso obligado de mujeres migrantes hacia el norte de la entidad o del país. En la actualidad, el nivel de corrupción en organismos de seguridad pública fronteriza debe ser un foco rojo para ser apagado, de lo contrario llegará un día en que se escale al primer lugar nacional, dio a conocer la ingeniera Celina Izquierdo Sánchez, del Observatorio Urbano Local de Cancún.

 

Pese a que es un tema trillado, no deja de ser preocupante, no es durante los últimos años sino que así ha sido desde que la trata de personas resultaba redituable, es decir, que representa cifras millonarias para la delincuencia organizada que la practica.

 

Además, se relaciona de manera directa con el tráfico, distribución o comercialización de drogas en grandes volúmenes desde Centro y Sudamérica con destino a México o Estados Unidos.

 

La frontera natural que existe con el país Belice, 130 kilómetros, pone a Quintana Roo como un paso obligado para cárteles de drogas que realizan este tipo de actividades. En el caso del municipio Othón P. Blanco separado por apenas 30 metros de ancho, aproximadamente, del Río Hondo, resulta atractivo para buscar puntos que no mantienen vigilancia permanente, es por ahí que aprovechan para el trasiego.

 

La lucha frontal que personal de la XI Zona Naval, como lo ha recalcado el vicealmirante Fernando Arturo Castañón Zamacona, realiza con equipo tecnológico de punta es precisamente para evitar la trata de personas, detección de armas, drogas y demás. Sin embargo, se requiere de mayor ayuda.

 

La desaparición de la Policía Fronteriza, en la ribera del Río Hondo, si bien no fue una estrategia adecuada, es meramente decisión del actual secretario estatal de Seguridad Pública, Carlos Bibiano Villa Castillo, como lo declaró en su momento.

 

En la capital, existen alrededor de 22 negocios denominados bares y cantinas, donde mujeres, que afirman tener la mayoría de edad, presta los servicios de atención al cliente.

 

Desde la perspectiva de la ingeniera Celina Izquierdo Sánchez, se requiere de inmediato un Modelo de Prevención Social de la Violencia y Delincuencia: la interacción y ayuda mutua entre organismos de este tipo debe culturizar, primeramente, a los locales y expandirlo a otros municipios, entidades federativas, naciones.

 

Si no se comienza desde un punto, no se puede abarcar todo de un día para otro, tomará varios años, pero en algún punto o momento se debe comenzar, dijo.