Benjamín Pat/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Tras cumplirse casi dos semanas del paro magisterial en el estado, ayer se registró un primer contacto con el jefe del ejecutivo estatal en instalaciones del C-4, sin embargo, luego de casi tres horas de diálogo, no hubo acuerdos.

El Comité de Lucha Estatal Magisterial entregó ayer al mediodía una propuesta de minuta a la Secretaría General de Gobierno, y fue por la tarde cuando trascendió el encuentro con el gobernador Roberto Borge Angulo.

En el encuentro participaron además los secretarios de gobierno y de educación, Gabriel Mendicuti Loria y Sara Latife Ruíz Chávez.

De acuerdo con el vocero del comité, Fausto Valdez Soberanes, en el encuentro se garantizó por parte del mandatario estatal que no habrá desalojo de los manifestantes, como se registró en el centro del país; además de salvaguardar la integridad de los maestros.

Entre los primeros efectos de este encuentro está el despido de un empleado del Palacio de Gobierno, que de acuerdo con la autoridad estatal fue el encargado de poner todo el día, desde la madrugada, la música en alto volumen, la cual torturó por varios días a los manifestantes.

De igual manera hubo el compromiso de que se restablezca la energía eléctrica y el alumbrado público en el lugar que desde algunos días permanece a oscuras.

Se espera que hoy haya un nuevo encuentro con las autoridades estatales, luego del análisis de cada uno de los puntos de la minuta presentada.

“Ellos están analizando nuestras demandas, estamos en espera del llamado para conocer los puntos de coincidencia”, recalcó el vocero.

Sin embargo, el asunto de la destitución de Sara Latife Ruiz Chávez de la Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ) quedó fuera.

No obstante, los paristas dejaron en claro que se mantendrán en plantón permanente frente al Palacio de Gobierno en Chetumal, y no habrá regreso a clases hasta que se atiendan sus demandas.

El lunes los docentes designarán a un grupo, con un representante por municipio, que viajará a la Ciudad de México en apoyo a sus compañeros desalojados.

Durante la presentación de los detalles del encuentro a la base magisterial los profesores intentaron impedir el acceso de los medios de comunicación.