Celcar López/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El proyecto “Diversidad genética de peces de importancia comercial en la zona sur del estado de Quintana Roo”, pretende establecer los niveles de biodiversidad genética en dos especies propuestas, pargo y boquinete, con la finalidad de aportar herramientas en cuanto al manejo de pesquerías y proteger esta variedad de especímenes, cuyo estudio iniciará en junio de este año y concluiría en 2017, declaró Carmen Villegas Sánchez, bióloga del Tecnológico de Chetumal.

Este programa de análisis ha sido diseñado para conocer sí existe la afectación de estas especies y su variación genética ante la movilidad económica de las áreas pesqueras en la entidad, como las cooperativas, relacionado con la comercialización de los recursos marinos, como lo son estas especies mencionadas.

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El estudio abarcará las costas de Holbox, Puerto Morelos, Banco Chinchorro, Punta Herrero e Xcalak, donde realizarán las pruebas extrayendo el ADN de los peces para conocer la semejanza, variación o no de estos especímenes.

Si en los estudios se halla una misma secuencia genética en los muestreos de una sola especie, entonces no se tiene una variación o diversidad, lo que representaría un peligro poblacional para esta especie, y finalmente llegar a un estado de peligro de extinción, por lo cual tendrían que proponerse períodos de veda, detalló la bióloga.

Lo ideal, afirmó Villegas Sánchez, es que exista una diversidad genética, lo que incidiría favorablemente en el crecimiento poblacional de una especie.