Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- A menos de un mes que venza el plazo, para los contribuyentes que forman parte del Régimen de Incorporación Fiscal (RIF), que exige que antes del 31 de enero presenten sus declaraciones fiscales, para que se mantengan dentro de esa modalidad, en las comunidades rurales del municipio de Bacalar, varios negocios pequeños, principalmente abarrotes, prefieren trabajar en la clandestinidad, aunque con temor de ser requeridos.

Negocio en casa

Rocío Caamal Romero, desde hace cuatro años cuenta con una pequeña tienda de abarrotes, en el interior de su vivienda, donde sus vecinos llegan a comprar, sin necesidad de anunciarse, pues lo considera innecesario, además que no quiere llamar la atención para no ser requerida por las autoridades fiscales. 

Dijo que anteriormente mandó a rotular el frente de su humilde negocio, pero ante las nuevas disposiciones fiscales, prefirió borrarlo, pues aseguró no tener la intención de presentar sus declaraciones, ya que desconoce el procedimiento para realizarlo y no cuenta con los recursos necesarios para contratar un despacho contable.

Indicó que “total la gente del pueblo ya conoce mi ubicación”, en clara alusión a su necesidad de trabajar en la clandestinidad, como sucede en muchos casos en las poblaciones rurales, ya que suponen que de esa manera podrían continuar su negocio sin ser requeridos por las autoridades fiscales. 

Deben presentar declaración 

No obstante, Moisés Zacatzín García, Administrador Local del Servicio al Contribuyente del Servicio de Administración Tributaria (SAT), el 31 de este mes vence el plazo para que los pequeños contribuyentes presenten sus declaraciones, ya que de no hacerlo, pasarán a formar parte del Régimen General de las actividades empresariales.

Con ello, perderían los beneficios que les otorga el RIF a los comerciantes en pequeño, como el hecho de que el porcentaje que pagarían por su declaración iría subiendo de manera gradual cada año, es decir, el primer año pagan sólo el 10% de sus ingresos; 20% el segundo; 30% el tercero y así sucesivamente, mientras que en el Régimen General pagan impuestos al 100%.