Redacción/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Un empresario chetumaleño y su hija frustraron ayer el secuestro de su familia, luego que un sujeto ingresó por la fuerza a su domicilio, ubicado en la Colonia Centro de la capital del estado.

De acuerdo con los datos recabados, los hechos ocurrieron a las 12:00 horas. Fue la trabajadora doméstica la que se percató de la presencia de una persona desconocida en el patio del inmueble, ubicado frente a las instalaciones del Sistema Quintanarroense de Comunicación Social (SQCS), la que primero preguntó por el “señor de la casa” y, al informársele que no había llegado, se abalanzó sobre la empleada, la sometió agresivamente y encerró en un baño de la planta baja, donde permaneció por varias horas maniatada.

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El sujeto ingresó al domicilio y aguardó pacientemente el arribo del empresario J. X. M., de 69 años, quien fue recibido a golpes una vez que cruzó la puerta de su casa.

Amarrado con sogas y cables, fue conducido a su recámara, en la planta alta, en donde el agresor le exigió con puñetazos dos millones de pesos en efectivo.

Casi de manera simultánea, la esposa C. X. S., de 78 años, e hija C. X. A., de 43 años, llegaron a la casa en vehículos distintos y, a pesar de los gritos de alerta que desde la recamara emitía el esposo y padre, ambas ingresaron sin sospechar lo que ahí ocurría.

Una vez adentro, las dos cayeron al suelo por los golpes y fueron amagadas con cuchillos de cocina, hasta llevarlas a la recamara para presionarles a pagar el botín ejerciendo sobre ellas agresiones físicas y psicológicas.

Después de tres horas de cautiverio, alrededor de las 15:00 horas, el captor informó a J. X. M. que se llevaría a su esposa e hija en una camioneta y que le serían devueltas “en pedacitos” si no entregaba la cantidad solicitada.

Según los testimonios recabados por Novedades Chetumal, fue en un descuido, cuando el agresor cambiaba las mordazas de sus padres, que C. X. A. logró desatarse y golpear al captor con una lámpara de la habitación.

El inesperado contrataque de la hija desarmó al sujeto y le permitió a su padre abalanzarse sobre el criminal.

“El delincuente mantenía comunicación vía teléfono celular con otro individuo, quien giraba instrucciones”, expresó la agraviada.

Ella aprovechó el momento para salir de la casa y pedir ayuda, recibiendo de inmediato el apoyo de vecinos, e incluso, de un automovilista que decidió ingresar y apoyarles. El presunto secuestrador, al verse acorralado, se encerró en el baño.

Esta situación dio tiempo a que elementos de la Policía Municipal de Othón P. Blanco se presentaran al lugar y capturaran al agresor, al que pusieron a disposición de la Policía Ministerial.

Las víctimas se presentaron ante la Fiscalía General del Estado (FGE) para presentar una denuncia por el delito de secuestro e intento de homicidio, la que transcurría hasta el cierre de esta edición.

Ante estos hechos, Jesús Alberto Capella Ibarra, secretario de Seguridad Pública en el estado, confirmó la detención de una persona del sexo masculino para quién solicitó se analice e investigue de manera determinante el presunto acto delictivo.

“Lamentablemente una familia sufre un enorme dolor de cabeza con un presunto delincuente, con un arma blanca que aparentemente los mantiene retenidos privados aparentemente de la libertad por unos minutos. Afortunadamente la familia y los vecinos logran hacer el llamado a las autoridades y generar la primera detención de esta persona que está puesta a disposición de las autoridades”, dijo el funcionario en una entrevista con la televisora estatal.

Destacó la importancia de motivar la firma del mando único con los municipios que aún no se han alineado para sumar esfuerzos de una manera más determinante y evitar que “estos enormes dolores de cabeza” se estén dando en algunos de los hogares del municipio.