Eva Murillo/SIPSE
CANCÚN.- En menos de un año, el programa “Adopta una colmena” logró que alrededor de 60 familias cancunenses se ofrezcan para tener un apiario en su jardín y contribuir al equilibrio ambiental de la ciudad.

Elmar Penagos, rescatista de abejas urbanas y encargado de las donaciones, regaló una colmena al kínder Los Derechos de los Niños para que este miércoles pudieran inaugurar el meliponario escolar.

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El apicultor urbano ve a las abejas como sus amigas y valora la importancia que tienen en el equilibrio ambiental de la ciudad, por eso se preocupa por cuidarlas y hallarles un buen lugar donde vivir.

La constante tala de selva para dar paso al desarrollo humano en Cancún, que afecta el hábitat de las especies que hay en el municipio, lo hizo pensar en crear conciencia ciudadana y difundir sus conocimientos sobre la apicultura y lanzar la campaña “Adopta una colmena”.

Los requisitos para ser cuidador y preservador adoptivo de diversas especies de abejas, son contar con un espacio alejado de ruidos estridentes y rodeado de vegetación, para lo cual solo basta manifestar la voluntad, porque el rescatista se encarga de llevar la colmena y ubicarla en un sitio adecuado y que empiecen a polinizar la zona y a generar miel.

“Los responsables de la colmena no tienen que hacer nada, ellas solitas se organizan, se alimentan y generan su miel, las personas únicamente deben cuidar que los cajones en donde están haciendo las celdas de miel estén en buen estado”, explicó el apicultor.

Detalló que los únicos que no pueden adoptar una colmena son las personas que viven en los nuevos fraccionamientos, porque en esos lugares no hay suficientes árboles ni flores. Actualmente tiene más de 30 colmenas de diferentes especies en el patio de su casa, las cuales están disponibles para la adopción, a través de la página en Facebook Miel Curativa Maya.