Selene Hidrogo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- En medio de un gran número de árboles como el zapote, ramón, chacá, chechén, guayacán, de la fauna como coatíes, osos hormigueros, mapaches, boas y calandrias, y con el aroma a copal se festejó el XXI aniversario del Parque Urbano Kabah con una ceremonia maya, un pulmón de 42 hectáreas que ofrece a los más de 700 visitantes diarios, un espacio para ejercitarse, aprender artes marciales y realizar manualidades.

“Lo importante es que la gente se reúna en este espacio para que se dé cuenta de lo importante que es conservar estas áreas naturales y crear conciencia en la conservación del medio ambiente, de la fauna y flora que habita aquí”, expresó Víctor Manuel Mena Sánchez, educador ambiental.

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La gran flora y fauna que ofrece este espacio es ideal para ir a conocer algunas especies en peligro de extinción como el árbol guayacán que para que mida más de 7 metros necesita aproximadamente de tres años, que  es de madera muy fuerte, la cual era utilizada para fabricar los rieles de las vías del tren.

“En el marco de la Semana de la Ecología pudimos reforestar diferentes zonas de los juegos, además se lleva a cabo el programa de las aves urbanas que se implementará cada mes para que todas las personas interesadas se acerquen y conozcan las aves  con  binoculares para que puedan observarlas, además se estará trabajando en un proyecto para que el parque sea lo más sustentable que se pueda” comentó Melissa Schiavon Avello, titular de la dirección de Áreas Naturales Protegidas.

Durante todo este tiempo se han renovado las palapas, el alambrado, los senderos se están adecuando, la guada, se hizo limpieza de los senderos, se restaura la palapa donde se hacen diferentes actividades, así como el arreglo y conservación del parque. 

Proyectos

“Estaremos haciendo programas con escuelas para hacer proyectos muy importantes de reciclado, de siembra de árboles, composta, además tenemos planteado arreglar el solar maya, que es una muestra de cómo vive esta cultura en la selva, se pretende que representen las actividades propias, como sembrar, comer y vivir alrededor de la naturaleza”, expresó.

El Parque Urbano Kabah será un museo, pues al acabarse la selva y la flora de la ciudad, aquí se podrán observar especies en conservación para que los niños conozcan los tipos de árboles y fauna que existen en la región.