Gustavo Villegas/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- En sus inicios eran 22 elementos pero hoy solo son cinco y desde hace nueve años sus salarios prácticamente no se han movido. Portan uniformes que son donados por empresas privadas o adquieren con sus propios sueldos. Se guarecen de las inclemencias del sol en casetas que en el mejor de los casos han sido reparadas con materiales de reciclaje. Por si esto no fuera suficiente pesa sobre ellos una velada amenaza de no hacer pública su situación o pueden perder sus empleos.

Ellos son los integrantes del cuerpo de Guardavidas de Cozumel de los cuales únicamente quedan cinco para vigilar aproximadamente 25 kilómetros de playa en un destino turístico en el que uno de sus atractivos es precisamente sus arenales en su zona oriental.

Anuncian Plan Municipal  

En un boletín emitido por la dirección de Comunicación Social del Ayuntamiento de Cozumel fechado el 13 de julio se daba a conocer que el día 15 del mismo se daría el banderazo de salida con el que “se puso en marcha el Plan Municipal de Auxilio Turístico Verano 2014, cuya finalidad es salvaguardar la integridad física de los habitantes y visitantes que arriban a la isla…”(sic).

Lo que la información oficial no mencionaba era solo hay cinco elementos del cuerpo de rescate acuático para vigilar las playas “Chen Rio”, “Playa Bonita”, “San Martín”, “Las Rocas”, “Punta Morena” y “Punta Chiqueros”. De todas estas “San Martín es la más peligrosa por las corrientes en esa área.

Al tratar de hablar con algunos de los integrantes de este agrupamiento sobre esta situación y porque faltaban elementos, estos declinaron hacer declaraciones sobre el tema, por temor de perder sus empleos y en el mejor de los casos sería objeto de la elaboración de un acta administrativa.

Puestos temporales

Este fin de semana se filtró información desde la dirección de Protección Civil de que hay dos vacantes para esta área. Sin embargo estas plazas son temporales y los contratos únicamente son por 30 días y no se conocían de candidatos para ocuparlas.

Un rescatista acuático gana de alrededor de seis mil pesos mensuales según fuentes al interior de la dependencia municipal.

Casetas de vigilancia en malas condiciones

En los recorridos por la zona oriental de la ínsula también se pudo observar las precarias condiciones en las que están las casetas de vigilancia que denotan ausencia total de mantenimiento. Estas torres de vigilancia no se comparan para nada con las que se han instalado en la zona de playas en Playa del Carmen.

La única cuatrimoto con la que cuentan para vigilar 25 mil metros lineales de playas, cortados en algunos sectores por roca viva, ya puede verse que sus neumáticos han perdido las huellas de tracción sobre la arena; lo que forza el motor para su desplazamiento.

También cuentan con un Jeep para hacer la vigilancia de los arenales siguiendo la ruta de la carretera costera, pero igualmente es un vehículo que está en precarias condiciones y ya presenta fallas.

Los uniformes son donados

Sus uniformes no portan sus distintivos oficiales ya que son donados o de medio uso que los elementos consiguen entre algún prestador de servicios turístico, empresarios, amigos o familiares.

Las banderas que son colocadas en estacas para informar sobre la condiciones del mar están descoloridas y desgarradas por la fuerza del viento.

A pesar de todas las carencias que padecen los guardavidas, ellos continúan con su honorable labor para cuidar a todos los bañistas de la isla.