Adrián Barreto/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- La contaminación de los cenotes y de las playas, ha impactado a la economía de los gastronómicos; la problemática se suma a otras que vive el sector turístico, como la presencia de los vendedores ambulantes que han burlado la ley modificando su forma de operar.

Manuel García Maldonado, director de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canicac), anunció que el mal olor que se desprende de la aguas, tanto de playas como cenotes, ha incomodado a los comensales de sus afiliados, que han comenzado a retirarse de las mesas.

“Ha sido motivo de preocupación de la Canirac, hemos estado en reuniones con Cofepris y Capa. Hay análisis contradictorios. Unos te dicen que sí y otros que no están contaminados. Estamos buscando que haya una autoridad que avale lo que en verdad está pasando”, dijo.

El problema de contaminación ha sido negados por la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (Capa), la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el ayuntamiento y la Coordinación para la Prevención de Riestos Sanitarios (Cofepris), e incluso las reuniones que han tenido en torno al tema han impedido la presencia de los medios de comunicación.

Sin embargo, es sólo una parte de las urgencias del sector restaurantero. El intento que hizo la administración municipal para regular la zona turística no bastó para erradicar elambulantaje.