Itzel Chan/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Las corrientes identificadas en cuatro puntos del Estado ponen en riesgo la vida de los turistas que no son expertos nadadores o que entran sin precaución.

Isla Blanca, Punta Cancún, Punta Nizuc y los arenales de Tulum, son considerados como los más peligrosos para los bañistas, porque las corrientes que se forman en estos puntos son conocidas como corrientes de resaca.

Este tipo de corrientes son aquellas que van de retroceso, desde la costa hacia el mar, de acuerdo con Carlos Eduardo Perera Camargo, instructor certificado en Capacitación en Seguridad Acuática, Primeros Auxilios y Reanimación Cardiopulmonar (Caproci).

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Son generadas debido al rompimiento de las olas y llegan fuertemente a las playas, aunque su intensidad depende de las alturas de oleaje y de las características de la orilla.

“Estas corrientes hacen que las personas se alejen de la playa y como no conocen, empiezan a nadar contra la corriente, pero al no haber nadie que los auxilie, se cansan y en algunos casos se ahogan”, expuso Perera Camargo.

En Playa Delfines es frecuente que se formen estas corrientes, por lo que generalmente guardavidas colocan banderas rojas para que las personas sepan que no es viable bañarse en estas zonas.

Caso contrario a las playas más peligrosas, Perera Camargo indicó que las más tranquilas se ubican en Puerto Morelos, como consecuencia de la protección que proporciona la barrera arrecifal y en el caso de Punta Sam, se debe a la ubicación de Isla Mujeres, territorio que disminuye las corrientes marinas hasta llegar a la costa.

Tan sólo en Semana Santa, en Tulum, Protección Civil estatal registró la muerte de 13 personas por causa de ahogamiento, ya que algunas personas se sumergieron en mar abierto bajo la ingesta de alcohol.

Para escapar de una corriente de resaca, guardavidas sugieren nadar a favor de la corriente (mayormente hacia la derecha), o bien, dejarse llevar hacia mar adentro, porque llega un punto en el que este tipo de oleaje se rompe y es posible retornar a la orilla sin luchar contracorriente.