Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Los altos costos que significan mantener el entorno ecológico del Cenote Azul, y los gastos de operación del restaurante que otorga empleo a 15 familias del Pueblo Mágico, obligó a la administración de ese sitio a implementar un cobro de entrada de 10 pesos por persona.

Javier Romero Soto, gerente del lugar, señaló que a la semana sólo para el desazolve de las fosas ecológicas erogan tres mil 800 pesos, y en temporada alta se realiza esa misma operación al menos cuatro veces a la semana, a fin de evitar la filtración de aguas jabonosas al cenote.

Adicionalmente se lleva a cabo un programa de reforestación en todo el contorno de ese cuerpo de agua profunda, que también les origina un costo constante, lo cual resulta básico para mantener la vegetación, flora y fauna que lo rodea.

Romero Soto mencionó que desde el año pasado las ventas no repuntan en el restaurante que administra, pues sólo disfrutaron ocho días de la temporada alta del año pasado, debido al paro magisterial y a las lluvias constantes que alejaron a los paseantes.

Dijo que en diciembre sólo disfrutaron dos semanas en todo el período vacacional y desde la primera quincena de enero, hasta la Semana Santa, tienen que esperar más de dos meses para que las ventas mejoren, pues desde que inició el año la afluencia de visitantes ha sido mínima, lo que obliga a la administración del lugar, buscar alternativas que mantenga esa fuente de empleo de varias familias.

Pilar Torres Miranda, visitante del Distrito Federal, dijo sentirse maravillada de la belleza del Cenote Azul, que consideró algo único en su tipo. Respecto al cobro, lo consideró como algo normal, debido a que en todos los sitios que ha visitado en otros puntos del país siempre tienen que pagar para ingresar. Señaló que momentos antes visitó el balneario ejidal cuya entrada también le originó un costo igual. “es normal”, dijo.