Abigail Becerra/SIPSE
CANCÚN, Q.Roo.- Los diagnósticos en etapa temprana del cáncer de mama en México son imposibles debido a la falta de especialización del sector, lo que genera la muerte de una mujer cada tres horas. 

Así lo dio a conocer Laura Torrecilla Torres, especialista e investigadora en oncología, quien dijo que el retardo en el diagnóstico clínico por parte de algunos institutos médicos es un factor altamente agravante para diagnosticar oportunamente el cáncer mamario, generando grandes costos en la salud al atender a las pacientes en fases intermedias y avanzadas de la enfermedad.

Como es cuando las tumoraciones malignas han avanzado hacia los nódulos linfáticos y a otros tejidos de la glándula mamaria, considerada una fase tres o cuando el proceso es metastático, es decir, cuando el cáncer se ha propagado a otras partes del cuerpo como huesos e hígado posicionada con una fase cuatro, también conocida como cáncer avanzado, subrayó.

En esta última etapa o fase es como se recibe a una de cada 10 pacientes generalmente en el sector salud, las cuales tienen bajas posibilidades de sobrevida y generando un costo en nuestro país de de 43 mil dólares por persona, poco más de 516 mil pesos, según datos de la Organización Panamericana de la Salud.

En la actualidad dijo sólo el Instituto Mexicano de Cancerología y el hospital 20 de Noviembre del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), en la Ciudad de México, son los primeros en generar diagnósticos oportunos en todo el país, esto debido a que el personal médico cuenta con estudios académicos mayores a otros y cumplen con la especialización diaria.

Actualmente se conoce con mayor precisión el cáncer de mama ya que se sabe qué lo origina, qué trastorno a nivel del material genético de las células dañadas permitiendo otorgar fármacos diseñados para atacar con mayor especificidad las células cancerígenas, otorgando una sobrevida mayor a las pacientes de dos a cinco años.

Indicó que una buena forma de decender los índices de mortalidad es mediante el reforzamiento por parte de la Secretaría de Salud para la realización de mastografías entre los 40 y 45 años y en edades aun menores cuando existen factores hereditarios o predisponentes para padecer cáncer de mama, así como concientizar a las jóvenes a realizarse su exploración mensual para detectar cualquier anormalidad en los senos.