Durante la solidaridad de los mexicanos de ayuda voluntaria para resarcir el tiradero, rescatar a víctimas y en auxilio de los damnificados que dejaron los temblores pasados, líderes de los partidos políticos, Morena, PRI, PAN, PRD y MC proponen al INE eliminar el financiamiento público para orientarlo como aportación para la reconstrucción de daños.

Cumpliendo algunas forma­li­dades ante el INE para la acreditación de tal decisión, consejeros electorales perciben “sin saber el por qué” en su acartonada declaración, muy a la ligera e irresponsable a la hora de emitir el concepto que no sería conveniente –a su modo– sobre la presunta renuncia de las prerrogativas que esos partidos así lo decidieron.

Para el consejero Ciro Murayama, financiar la política con recursos privados debe reflexionarse muy bien, pues “en una economía tan desigual como la nuestra también tiene efectos secundarios… sería privatizar las campañas”, acotó.

Declaraciones banales sin importar que invade la necesidad de auxilio por la tragedia que dejaron los sismos del 7 y 19 de septiembre llevó a los líderes a crear un movimiento de aportación de los partidos, PRI, PAN, PRD, MC y Morena.

 Jaime Rivera, otro de los miembros del INE, dijo que es necesario reflexionar sobre disminuir los recursos públicos a los partidos, pero que acabar con ese financiamiento podría volver inequitativas las elecciones que distorsionarían la competencia democrática si se permite el financiamiento de poderes fácticos legales o ilegales.

Hoy el INE es el principal opositor y defensor sin disimulo del dinero designado a los partidos que impactará con el “manchón” de incredulidad hacia ese instituto electoral a la hora de realizar las campañas electorales venideras en 2018, que ya no serían ciudadanas, sino inversiones empresariales, ultimando a la democracia, se augura.

Mauricio Merino, ex consejero del IFE, también alertó sobre la eliminación del financiamiento público y pidió a los políticos serenarse ante las propuestas al calor de la demanda social por el terremoto.

El poder insumiso del INE. La frialdad con que trata el asunto con la decisión de los partidos Morena, PRI, PAN, PRD y MC, no habla de una campaña de solidaridad con el que se pretende dar el mismo trato, con las mismas imágenes, las mismas palabras y los mismos argumentos a los electores que los han validado en el cargo que ostentan ahora y, ya en los procesos 2018, sería el implacable rechazo popular, por no poder aportar nada.

Un manejo electoral –se subraya– sin el toque democrático subliminal de los ciudadanos fracasará, porque no estiman decir con triste elocuencia el deceso de ciudadanos caídos y colapsado edificios y viviendas causados por los sismos dejando una estela de muerte, desolación y desgracia, indica no tener alma humanitaria, desalmados, indolentes.

Es decir, las instancias imperiales disparan contra el pueblo en el paredón… apelando el infeliz por causa equiparable en desgracia por cuestionar una intervención humanitaria bajo el principio de la responsabilidad para ayudar a los caídos.

Huelga aclarar que en México hay más muertes, escasez, salud deteriorada, dolor y sufrimiento por el paso de los sismos pasados, así como tampoco es un secreto que el pueblo otorga los montos de las prerrogativas a los partidos vía impuestos y contribuciones.

Fue la creación del hombre para sobrevivir en armonía con la Madre Tierra bajo el hilo conductor del concilio y armonía solidaria, y no hay potencia bélica que pueda destruir ese plan divino.

La fractura política será una demostración a la insensatez o la ausencia de voluntad, al no poder entenderse en relación con temas de fondo de enorme trascendencia que acaso pueda conducir en un futuro a una reconciliación verdadera.

Se aplicarán las mismas frases usadas para la abstención, predicando no acudir a votar, porque eso sería traicionar a los ciudadanos caídos en desgracia.