Decenas de trabajadores del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) estallaron en protestas, que incluyó el bloqueo parcial de la avenida Insurgentes, la principal de la capital de Quintana Roo.

El motivo de las manifestaciones son las constantes fallas en la energía eléctrica que se recrudeció ayer lunes, paralizando prácticamente las operaciones del nosocomio. Incluso, las mismas autoridades reconocieron que varios pacientes intubados fueron trasladados a otros centros médicos.

Cerca de las seis de la mañana, del lunes, la máquina encargada de generar la electricidad para el edificio “tronó”, provocando un apagón general en la clínica. Según los trabajadores, el sitio llevaba una semana operando con planta.

Desesperado, el personal administrativo, médicos y de enfermería salieron a la calle para manifestarse y exigir la presencia del director del ISSSTE, Pedro Zenteno Santaella, y el encargado del hospital, Abimael Durán Alcocer.

“Queremos dejar constancia de que no estamos en paro: nuestras compañeras enfermeras y doctoras están haciendo todo lo posible para atender a los pacientes en estas deplorables condiciones: sin medicinas ni electricidad. Las cirugías fueron canceladas, tenemos personas conectadas a las máquinas de hemodiálisis rogando que regrese la luz para continuar con su tratamiento. Nosotros estamos dando la cara, pero nuestros directivos no”, declaró el doctor Óscar Bernal González.

Casi de inmediato llegó Flavio Carlos Rosado, secretario de Salud estatal, quien se comprometió a gestionar ante las instancias federales este tema, alegando que el Estado no tiene facultades sobre un inmueble administrado por la federación.

“Nosotros como Gobierno del  Estado vamos a seguir gestionando que haya más oferta en salud”, dijo el funcionario estatal.

No fue sino hasta casi cuatro horas después que llegaron el delegado del ISSSTE y director de la clínica en la capital, atendieron las quejas del personal.

Para calmar los ánimos, aceptaron un recorrido por todo el edificio para verificar las carencias del mismo, prometiendo atenderlo lo más pronto posible.

Como primera instrucción anunciaron la reparación y mantenimiento de la planta generadora de energía. Descartaron que por el momento se adquiera nueva infraestructura, justificándose con el hecho de que la falta de recursos hace imposible adquirir la maquinaria.

Otras de las quejas es por la falta de medicamentos para los pacientes. Al respecto, el delegado dijo que serán solicitados los activos necesarios para garantizar una atención de nivel a la población.

La clínica del ISSSTE de Chetumal atiende a más de 12 mil 500 burócratas de los tres niveles de gobierno, de la región sur de Quintana Roo.

De acuerdo con la información, las fallas en el sistema eléctrico empezaron desde hace una semana, pero la solución que se implementó fue únicamente operar con plantas generadoras en las áreas prioritarias. Sin embargo, ayer lunes, la planta también dejó de funcionar.