Revisan una casa sin orden judicial y se llevan pertenencias

Judiciales ingresaron al domicilio y se apoderaron de tres celulares y una computadora.

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La dependencia estatal no le ha dado información a Yaqui "N" sobre la situación jurídica de su hijo, quien fue aprehendido con droga el día que los agentes le registraron su vivienda. (Redacción/SIPSE)
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Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Yaqui "N" estaba en su domicilio ubicado en la Región 209, eran las cuatro de la madrugada cuando dos vehículos se estacionaron frente a su casa. Tuvo un mal presentimiento, vio a varias personas, entre ellas tres mujeres, todos portaban pasamontañas. Uno de los sujetos le mostró su placa de la Policía Judicial del Estado (PJE) y le ordenó que abriera. En 20 minutos revisaron toda su vivienda, sin ninguna orden judicial, se llevaron tres celulares y su computadora. Buscaban droga, porque su hijo había sido detenido con posesión de algunos gramos.

En el año van 140 expedientes iniciados por abuso de autoridad contra elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

"No hagas nada, porque también te involucramos" 

No ha dormido, para calmar sus nervios tiene que salir a fumar un cigarro. No sabe qué hacer, porque siente miedo de que los judiciales cumplan las amenazas que le hicieron: “no hagas nada, porque también a ti te involucramos”.

A las 10 horas de ayer, Yaqui llegó a las instalaciones de la PJE para conocer la situación jurídica de su hijo de 21 años, originario de Cuernavaca, Morelos.

Lo único que sabe de él es que lo detuvieron por venta de droga, fue lo que le dijeron los agentes judiciales. El oficial que está en la entrada de las oficinas de la PJE, le informó que ahí no lo tenían y que se trasladara a la agencia de la Región 89, donde se encuentra la Fiscalía Especializada en Atención al Narcomenudeo, para que le informaran sobre el caso.

Su hijo desapareció

La noche anterior había salido a comprar a una tienda de conveniencia. Su hijo se quedó en su casa, pero cuando regresó ya no estaba, se había llevado su vehículo. Pensó que fue a comprar algunas cervezas.

Llegó la medianoche y todavía no regresaba el joven, abrió su computadora y empezó a platicar con algunos amigos y familiares por las redes sociales. El cansancio hizo que se quedara dormida.

A las cuatro de la madrugada escuchó ruidos afuera de su vivienda, se asomó y vio dos vehículos compactos con vidrios polarizados. Un sujeto estaba metiendo la mano por la ventana para abrir la puerta.

Bajó y preguntó quiénes eran, uno de ellos levantó la mano y le mostró una placa, se identificó como agente de la Policía Judicial. De inmediato le dio la orden de abrir.

La amenazan con "sembrarle" droga

Los judiciales le dijeron que se quedara sentada, empezaron a revisar toda su casa: le metieron los dedos a la comida, voltearon colchones, sacaron la ropa del closet.

Fue en ese momento que le informaron que estaba detenido su hijo por venta de droga. Ella les comentó que no sabía nada de que su vástago se dedicara a esa actividad ilícita. La amenazaron que si no cooperaba también la iban a inculpar. De hecho le mostraron un pequeño envoltorio, al parecer con marihuana.

Los judiciales se llevaron tres celulares y una computadora

Cuando terminó la revisión se dio cuenta que los sujetos se habían llevado tres celulares y su computadora, trató de alcanzarlos para reclamarles, pero se subieron a sus vehículos y se retiraron.

De acuerdo al artículo 16 de la Constitución Mexicana, nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de un mandamiento escrito de la autoridad competente.

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