Ángel Villegas/SIPSE
CANCÚN, Quintana Roo.- Pablo Ortega ha decidido bajarse de la loma, al menos por ahora solo de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP). El veterano pitcher tamaulipeco, icono de Yaquis de Obregón, anunció su retiro como profesional.

El llamado ‘Maestro’, originario de Nuevo Laredo, Tamaulipas, quien también incursionó en las Menores, en Estados Unidos, forjó una exitosa trayectoria en este circuito (17 años), ya que defendió incondicionalmente la casaca de los Venados de Mazatlán (1997 a 2011), Naranjeros  de Hermosillo (2016-2017) y Yaquis de Obregón (2017-2018), del que será coach de pitcheo en la actual 2018-2019.

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“Cada partido, cada salida que tuve, aquí, en el invierno, fue muy especial. El jueves por la noche tomé la decisión, por cierto, muy difícil para mí de aceptar, pero a la vez estaba muy consciente de dónde estaba parado. Estoy muy satis-fecho por tomarla, sobre todo, la oportunidad que me dan, de hacerme la pro-puesta para convertirme en su coach de pitcheo. Es algo muy valioso para mí, muy significativo”, declaró a través de la cuenta oficial de Twitter de los obre-gonenses.

Con Tigres, todavía no, pero…

El hecho también deja entrever un inminente retiro con los Tigres (extraoficial en este momento) de cara a la campaña de 2019, posiblemente durante el transcurso de la misma.

En la LMB, con el equipo de sus amores, su éxito ha sido magistral, con 17 temporadas, 12 con Quintana Roo, tres con Puebla y dos como capitalinos, en la Ciudad de México, además de dos con Pericos -la de 2002 la dividió con los bengalíes- y una con Dos Laredos, en 1995, según el libro de estadísticas ‘Quién es quién’). Dos décadas de labrar un nombre.

Ortega debutó en LMB en 1995 y después probó suerte en Ligas Menores, en Estados Unidos. En 2000 volvió al circuito de verano con los felinos, para ser bicampeón, cuando todavía jugaban en la capital del país.

Con las fieras, inició su ‘rugido’ en 2000, cuando eran identificados como Ti-gres de México. Fue un baluarte de la organización, fundamental en la con-quista de seis estrellas, dos en la capital del país (en el mismo 2000 y 2001), una en Puebla (2005) y tres en territorio caribeño (2011, 2013 y 2015), el más ganador en la historia del club.