Gustavo Villegas/ SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- “No nos desesperemos. La ofuscación mental nos puede llevar a ser peores que aquellas personas que son una amenaza para otros (…), podemos acabar manchándonos las manos de sangre”, opinó el sacerdote Juan José Soto Castro, párroco de la Iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, al solicitarle su opinión de los recientes eventos en los que ciudadanos han estado a punto de linchar delincuentes.

La noche del viernes se dio el más reciente episodio en la colonia 10 de Abril, en el que un centenar de personas acudieron al domicilio de una pareja de presuntos ladrones para darles un escarmiento.

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Por otra parte, hizo un llamado a los candidatos de los partidos políticos que buscan un puesto de elección popular a presentar propuestas posibles y tangibles que ayuden a que todos juntos se pueda hacer más por Cozumel. Videos y fotografías en las que ciudadanos atrapan delincuentes, los golpean, maniatan y hasta los despojan de sus ropas para que caminen desnudos por las calles de Cozumel son cada vez más frecuentes.

Tan solo en las últimas 24 horas se dieron tres eventos de esta naturaleza. Uno de ellos fue en la 65 avenida con calle 6 norte, donde vecinos, hartos de ser víctimas de atracos por parte de una pareja que vive en la zona, se congregaron a las puertas de su vivienda para lincharlos. La multitud detuvo a una persona a quien propinaron varios golpes hasta que se percataron que no era a quien buscaban.

Otro más fue en la 70 avenida con calle 8, donde un sujeto intentó robarse una motocicleta, pero fue sorprendido por los vecinos quienes tras propinarle una golpiza lo dejaron desnudo. El padre Juan José Soto pidió a los habitantes de la isla no caer en situaciones de violencia o de hacer justicia por mano propia, ya que esto puede llevarlos a la cárcel.

Es muy importante que las autoridades sean responsables de velar por la sociedad, recalcó. Hizo un exhorto a la ciudadanía para en caso de ser víctimas de la delincuencia presenten su denuncia ante las autoridades correspondientes y evitar a toda costa la posibilidad de quitarle la vida a una persona como consecuencia de estos hechos violentos.