Carlos Manzanero/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Los operadores de transporte público de la Alianza de Camioneros fueron sorprendidos con una prueba de alcoholímetro antes de iniciar su jornada de trabajo.

La finalidad del examen es evitar que algún chofer trabaje con aliento alcohólico o en estado de ebriedad.

El secretario de la Organización Alianza de Camioneros, Arturo Rodríguez, señaló que el operador que resulte positivo en la prueba sería sancionado e inclusive despedido.

Por su parte, Agustín Escalante, secretario general de la Alianza de Camioneros, declaró que de esta manera se permite que solo los operadores en óptimas condiciones estén al frente del volante, ya que de ellos depende la vida de decenas de usuarios del servicio.

En total se realizaron 800 pruebas,  400 en el turno matutino y 400 en el vespertino.

Las pruebas serán aplicadas diariamente a fin de garantizar la seguridad de los usuarios.