Edgardo Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Reportan cañeros precipitaciones históricas en más de 30 años ya que en sólo una semana acumularon 100 milímetros de agua, lo que ocasionó que la molienda estuviera prácticamente detenida por dos semanas. Se informa además un 90% de afectación de caminos, lo que también ha ocasionado problemas para la zafra 2013-2014.

Por lo anterior, según la versión de productores y dirigentes cañeros, fue durante la semana pasada que se registró el mayor volumen de agua almacenada en la ribera del río Hondo, dado que durante las precipitaciones anteriores no habían presentado tanta cantidad de agua.

Gabriel Rivas Canul, presidente de la Asociación de Productores Cañeros A.C., mencionó que en los últimos 35 años no se tenían datos de esta magnitud en la región productiva, pues según algunos datos antiguos, fue durante la temporada 1979-1980 cuando se reportó una zafra accidentada a consecuencia de las lluvias, no obstante, no se tiene un registro completo de la cantidad de agua que cayó en esas fechas.

Ante esta situación, dijo que la cantidad de lluvia que se presentó durante la semana que comprenden del 17 al 24 de noviembre y según el reporte que se les entrega a las agrupaciones, se presentó un volumen de 100 milímetros, lo que prácticamente representa la cantidad de lluvia de un mes en la mitad del estado de Quintana Roo.

Este grosor de agua, ocasionó que varios de los caminos se encuentren totalmente abnegados debido a que los 400 kilómetros de caminos sacacosecha  presentan un 90% de afectaciones a consecuencia del alto nivel de humedad que han generado las lluvias y al paso constante de camiones con más de 15 toneladas de caña, por lo que actualmente no se han podido realizar los trabajos de reparación y mantenimientos a la red de caminos parcelarios.

Aarón Renteral Campos, presidente de la Unión Local de Productores Cañeros, informó que las lluvias continúan en la región y no sólo han causado retrasos en la molienda y daños a los caminos, sino también a los propios productores ya que existen varias hectáreas de caña inundadas y otras más que no han podido cosecharse dado que los terrenos se han puesto en mal estado ocasionando que no se puedan quemar e impidiendo el paso a los cortadores de caña.

Por ello, refirió que la zafra todavía no se ha normalizado y aún continúan entregado la poca caña que se puede cortar al batey. Señaló que con el inicio de la temporada invernal las lluvias pudieran cesar y con ello se reactivaría al 100% la cosecha de la caña de azúcar en la ribera del río Hondo.