Adrián Barreto/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.-  El 10 de noviembre del 2015, Mauricio Góngora Escalante, a través de la Dirección de Obras Públicas otorgó dos ampliaciones de la unidad deportiva de Puerto Aventuras que se incluyeron en el Programa Operativo Anual (POA) 2016, pero que ya habían sido incluidas en 2015 y que eran complementarias del proyecto inicial que igualmente se cobró dos veces.

Antonio Ramos, activista social, hizo ese hallazgo en una revisión de las obras de la pasada administración, pero además de que los dos contratos se entregaron dos veces, la misma construcción de la unidad deportiva tiene una serie de irregularidades, pues lo presentado en los informes no concuerdan en la cantidad con las actas de fallo.

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A lo largo del 2015, se construyó casi la totalidad del deportivo. Lo hizo el Grupo Inmobiliario GEA S.A. de C.V. por un monto de 41 millones 206 mil 930 pesos, según el fallo de obra, aunque el informe que Góngora Escalante exhibió en transparencia indica que fue por 47 millones 800 mil 39 pesos, una de las discrepancias que presenta esta obra y que obedecen a inflar los costos de la misma para fines contables, de acuerdo con Ramos.

Sin embargo, en julio del 2014 ya le habían asignado la construcción de la Unidad Deportiva a la empresa Ilco Constructores por un monto de 10 millones 308 mil 603 pesos, aunque se infló a 12 millones 282 mil 797 pesos, una diferencia que se nota entre el acta de fallo y lo exhibido en transparencia.

Esas observaciones son sólo la mitad de lo que Antonio Ramos presume como un desfalco, porque en marzo del 2016, ya cuando Rafael Castro Castro era el presidente, el Cabildo aprobó el cierre definitivo del POA 2015, ahí se asegura que al Grupo Inmobiliario GEA se le pagaron no 47 ni 41 millones, sino 49 millones 996 mil 930 pesos.

Pero eso no es todo, en el mismo POA 2015 se incluyeron el, “proyecto 68: Ampliación de Unidad Deportiva Puerto Aventuras, Cancha de Usos Múltiples con un costo 1 millón 480 mil 426 pesos provenientes con recursos federales del Ramo 23 para Contingencias Económicas C”, y el “proyecto 80: Ampliación de Unidad Deportiva Puerto Aventuras Pista y Exterior con un costo de 2 millones 432 mil 563 pesos; recursos federales del Ramo 23 para Proyectos de Desarrollo Regional”.

Ramos encontró que ambas obras que ya había aprobado el Cabildo como parte del POA 2015, se volvieron a incluir en el POA 2016 pero esta vez con montos quintuplicados; en el caso la cancha de usos múltiples alcanzó 8 millones 559 mil 573 pesos, aunque en el acta de fallo que se dio el 10 de noviembre del 2015 se indica que a la empresa Caminos de la Riviera S.A. De C.V. cobró 8 millones 383 mil 254 pesos 14 centavos.

Costó de más

El caso de la ampliación de Pista y Exterior que también se duplicó, se le asignó nuevamente a Ilco Constructores S.A. de C.V. que según el POA 2016 tiene un presupuesto de 7 millones 557 mil 436 pesos, aunque el acta de fallo –también de fecha 10 de noviembre del 2015- indica que esa empresa se embolsó 8 millones 388 mil 149 pesos 35 centavos.

Para Antonio Ramos esta duplicidad de esas dos obras complementarias (pista y exterior y cancha de usos múltiples), que aparecen en los POA 2015 y 2016 podría arrojar un desfalco de 16 millones 97 mil 9 pesos dado que ya se habían hecho con recursos 2015 con costos menores, según lo avaló el propio Cabildo en marzo del 2015.

Si se hace la suma de lo que se presume que se ha gastado según las actas de fallos duplicadas y lo que se aprobó por el Cabildo en POA 2015 más el primer pago que recibió la empresa Ilco de 10 millones, la unidad deportiva de Puerto Aventuras habría costado casi 81 millones de pesos, aproximadamente, 19 millones más de lo que aseguró Mauricio Góngora Escalante en un boletín que ofreció el 20 de enero del 2016, en el que afirmó que la primera fase costó 12 millones y la segunda 50 millones.

El pasado martes, Cristina Torres Gómez, presidenta municipal, anunció que fueron requeridos por la Conade porque Góngora Escalante dejó de invertir 20 millones de pesos que estaban comprometidos con la instancia federal, dejando inconclusa la obra.