Gustavo Villegas/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- Con una sencilla recepción organizada por la administración de la terminal de cruceros “Punta Langosta”, se recibió a los pasajeros del crucero japonés Asuka II. Los turistas nipones que descendieron de la embarcación y que desde hace varios años no llegaba a Cozumel, no tuvieron información de primera mano por parte de las autoridades de turismo del municipio sobre los atractivos naturales o de interés histórico del destino.

Ni uno solo de los empleados del área de Turismo estuvo ahí para dar orientación a los pasajeros sobre los sitios que podían visitar.

Programado para las nueve de la mañana, el navío con capacidad para 872 pasajeros y 470 tripulantes atracó conforme a lo estipulado. Un grupo de mariachis recibieron a los primeros pasajeros que descendieron 47 minutos después para tomarse la foto del recuerdo.

Tras caminar por la plataforma de la terminal, los primeros turistas japoneses se detuvieron en la plaza comercial del muelle.

Otros siguieron de largo por el malecón, pero sin saber qué rumbo tomar, sin saber que muy cerca del muelle hay un museo en el que se hace una reseña de la historia de la isla.

Desorientados caminaron por la Melgar, buscando algo de interés que no fueran sombreros y maracas.

La mayoría de los pasajeros eran personas de la tercera edad, pero en conjunto se quedaron sin conocer playas, sitios históricos, dónde comer o cómo disfrutar por lo menos de un paseo por los arrecifes en una embarcación de fondo de cristal.

El Asuka II pertenece a la empresa naviera Nippon Yusen Kaisha (NYK), una de las gigantes  en el continente asiático.