Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Apicultores del municipio de Bacalar, pidieron la intervención de la Profepa para frenar la devastación de la flora y fauna en un asentamiento menonita ubicado en las cercanías del poblado de San Fernando.

Eliu Omar Koyoc Pech, integrante de la AC “Línea Verde Punto Azul”, pidió la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para que se frene el ecocidio que un grupo de menonitas está realizando con la devastación de varias hectáreas.

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A simple vista se puede observar alrededor de 200 hectáreas que se han limpiado para mecanizados, pero los mismos ejidatarios vendieron el derecho de sus parcelas de 30, 40 y 50 hectáreas cada una, que suman en total alrededor de mil hectáreas en ese sitio.

Los pobladores de esa localidad, señalaron que la Profepa clausuró una parcela y un camino hace algunos meses, pero eso no frenó los trabajos ya que los menonitas siguen desmontando, suponen que asentarán un campamento como el de Reforma.

Quienes se encuentran más preocupados son los apicultores de la zona, quienes desde finales del año pasado padecen de floración por la intensa sequía, consideraron que la devastación de árboles y flora de la región afectará aún más la actividad que desarrollan.

Alberto Chí Puc, productor apícola de la comunidad de Nuevo Jerusalén, consideró importante la intervención de la dependencia federal para que limite la devastación que están realizando los menonitas, “ellos acostumbran cultivar en grandes extensiones con sus maquinarias y para ello barren con todo lo que encuentran a su paso sin importarles que sean árboles o plantas de cualquier tamaño”, dijo.

La actividad apícola es una de las preponderantes en el noreste del municipio de Bacalar, donde las dos agrupaciones: “Apícola Renacimiento” y “Kabi Habin”, aglutinan a cerca de mil 500 productores y 35 mil colmenas, en toda la geografía municipal.

Para mantener sus abejas dentro de los apiarios, los apicultores los alimentan con jarabes de miel, lo que representa un gasto extra para su actividad; no obstante, el 20% de cada colmena ha perecido o se ha alejado de los enjambres.